Iba a cazar, su perro pisó el rifle y lo mató de un tiro en la espalda

El hombre, de 30 años, fue encontrado muerto dentro de su camioneta. En el asiento de atrás estaba su perro y el rifle de caza. 

El trágico final del joven.

26 de Enero de 2023 10:17

Por Redacción 0223

PARA 0223

Por un accidente fatal, un cazador terminó herido de muerte por su propio arma. El hombre, de 30 años, falleció esta semana en Kansas, Estados Unidos, al recibir un tiro por la espalda que salió de su rifle, accionado por su perro, al que llevaba como compañero para un día de caza. La bala le entró por la espalda mientras manejaba y murió al instante.

Los policías se encontraron con la trágica escena, al descubrir a un hombre sin vida, con un disparo en la espalda, dentro de su camioneta. La única hipótesis posible que manejan es que el animal viajaba en el asiento trasero de la camioneta de su dueño cuando pisó el fusil de que, accidentalmente se accionó, con tan mala suerte que impactó de manera mortal en el cuerpo de la víctima, identificada como Joseph Smith.

Varias dotaciones de la Policía se acercaron rápidamente al lugar de los hechos pero no pudieron hacer nada por la vida del cazador pese a practicarle la respiración cardiopulmonar. Según informó la Policía, en el interior del vehículo encontraron “material de caza y un rifle”.

Los agentes del sheriff del condado de Summer, cercano a Wichita, la ciudad más larga del estado, determinaron que el hombre había muerto por los disparos recibidos en la espalda después de que el perro pisara el arma y accionara el gatillo por accidente. La investigación continúa, pero, según las primeras informaciones, “se trata de un accidente de caza”.

Smith trabajaba como plomero pero era un gran aficionado a la caza. Sus allegados lo recordaban así en declaraciones recogidas por el 'New York Post': "Joe es absolutamente la persona más singular que he tenido el placer de conocer. Fue amado por todos nosotros en todos los ámbitos de la vida", comentaba su jefe en un GoFundMe creado para ayudar a la familia de Smith a cubrir los costos del funeral.

Además, agregó: “Nos hacía reír todas las mañanas, ya fuera por él o con él. Siempre se aseguraba de ser una luz positiva en mi empresa. No importa cuán malo o estresante haya sido mi día o el nuestro, Joe siempre tenía algo para levantarnos el ánimo”.

No es la primera vez que un perro acaba con la vida de su dueño de manera fortuita. En noviembre, en Turquía, otro hombre murió de un disparo después de que su perro disparara el arma.