Curas denunciaron el recorte en villas y barrios populares

En el marco de la jornada de reclamo de organizaciones sociales por la falta de alimentos, desde el Equipo de Sacerdotes de Villas y Barrios Populares emitieron un duro comunicado en el que mostraron preocupación por la situación actual.

"No es bueno desenchufar el Estado de las villas y asentamientos", expresaron y recordaron que una de las principales funciones del Estado es velar por los más postergados. "El preámbulo dice que dos de los objetivos de la Constitución Nacional son afianzar la justicia (los desfavorecidos que nacieron en villas y no tuvieron oportunidades necesitan la intervención del Estado) y promover el bienestar general", remarcaron.

Adentrándose en el tema, recordaron cómo se configuraron estos barrios a lo largo del tiempo y mencionaron que antes "las villas no figuraban en los mapas", sino que "aparecían como espacios verdes". "Cuando la sociedad las conoció, se habló de erradicación, luego de urbanización, hasta que se instaló bastante el concepto de integración urbana. Con idas y venidas, se fueron dando pasos en este sentido", añadieron los sacerdotes.

A la par, destacaron el trabajo del Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap), cuyo relevamiento les permitió llegar a los lugares más ignorados. "Valoramos las políticas públicas que se fueron dando en barrios populares, que posibilitaron crecer en inclusión. Así, muchos vecinos pudieron lograr mejor acceso a cloacas, agua, luz, escuela, salita y centros comunitarios. Otros pudieron ampliar y mejorar sus humildes casas. Hoy es un golpe muy duro bajar el financiamiento que beneficia a más de 5 millones de vecinos, entre los cuales la mayoría son menores", lamentaron.

"La intervención del Estado en los más de 5000 barrios populares de todo el país no puede decaer. Bajar el presupuesto de la Fisu (Fondo de Integración Socio-Urbana) sería volver para atrás. No podemos tolerar semejante retroceso que genera mayor exclusión y, por lo tanto, inseguridad y desintegración social. Prácticamente es la única política pública que apunta al núcleo duro de la pobreza", enfatizaron.

Sin restarle importancia al dialogo, solicitaron escucha por parte de Gobierno nacional para que la integración socio-urbana "sea una realidad cada vez más efectiva".