Un punto de inflexión en el Concejo Deliberante, una decisión que impacta en la Quinta y los ediles favorecidos

Algo se rompió en la convivencia en el Concejo Deliberante y se esperan las consecuencias

Escenas de violencia no es la primera ni la última vez que se verán durante una sesión del Concejo Deliberante. Bajo ciertos márgenes, forman parte de la dinámica de la política en estos lares, donde se la vive con tanto pulso y pasión. Pero lo ocurrido el miércoles, reconocen incluso desde más de un bloque, tiene la apariencia de marcar un punto de inflexión en la convivencia interna.

“A este pendejo no nos lo bancamos más”, deslizan desde el kirchnerismo sobre Julián Bussetti, concejal del Pro que protagonizó los incidentes. Ese tono por ahora lo mantienen fuera de micrófono pero de a poco en on suben los conceptos. Lo hizo en la misma sesión la propia Virginia Sívori, concejala caracterizada por su perfil sosegado. “Este chiquito viene a provocar”, dijo al final de la sesión, cuando se volvió a picar fuerte el debate tras una nueva intervención agresiva del edil que hace poco cumplió 30 años.

El nuevo elemento que se sumó fue la respuesta también violenta y organizada de la “barra” -como se conoce en la jerga a la tribuna habilitada para el público en la sala de sesiones- ante la intervención de Bussetti, quien llegó a la sesión con una remera y un taza alusiva a la condena contra Cristina Fernández. Al segundo de iniciada su exposición, la barra se exaltó más por lo acumulado en semanas que por las propias palabras de Bussetti, quien apenas se limitó a leer un listado de exfuncionarios kirchneristas procesados y condenados por corrupción, mientras recibía insultos de todos los colores, hasta huevazos y alguna botella de plástico semillena e incluso folletos donde se lo ve marchando junto al kirchnerismo en una movilización de hace años. "Fuiste kirchnerista, macrista y ahora sos libertario", decía el panfleto.

“Si no quieren más códigos, no habrá más códigos, pero será por ustedes, no por nosotros”, le alertó el presidente del bloque Pro, Agustín Neme, al kirchnerismo y en ese tramo final de la sesión donde se reeditó el conflicto, con nuevos gritos, aunque esta vez sin huevos ni botellazos. En esta oportunidad se pudo ver un bloque oficialista más abroquelado que en conflictos anteriores similares provocados por Bussetti, donde incluso en algún momento se especuló con la renuncia de Neme al bloque.

“Hace un año y medio que aguantamos provocaciones del concejal, se tiene que hacer cargo de las cosas que hace y dice”, reclamó Valeria Crespo. Esas provocaciones tienen como punto culmine las permanentes referencias a militantes kirchneristas como cucarachas, algo habitual en sus redes sociales.

“No está bueno lo que pasó, pero si se engendra violencia, violencia se obtiene. Eso lo tiene que saber. Después tampoco es para hacerse tanto los ruleros, sino miremos la violencia que se promueve desde el propio presidente de la Nación”, analizaron desde concejalía opositora, mientras se le dibujaba una sonrisa al recordar comentarios sobre la rápida salida del edil del recinto, cuando todo comenzó a complicarse.

Humoradas aparte, la incógnita está en cómo proseguirá la convivencia dentro del Concejo Deliberante en este clima de tensión y, como si fuera poco, con el inicio de la campaña electoral a la vuelta de la esquina. “Hay que recomponer”, reconocen desde distintas bancadas.

La UCR de Tandil rechaza un frente y va sola con la histórica Lista 3

Profundo impacto generó en la política de la Quinta Sección la decisión que tomó el radicalismo tandilense en la reciente reunión de su comité, donde se decidió ir a elecciones en soledad y bajo la histórica lista 3 de la UCR.

Tras el encuentro encabezado por Miguel Lunghi (hijo), desde el partido se enfatizó que “nuestras alianzas anteriores nos llevaron al debilitamiento, fueron un camino sin sentido y sin retorno que nos dejó al borde de la extinción, por eso nos pronunciamos en contra de la búsqueda de nuevos atajos electorales”.

“Ya no queremos acompañar mansamente proyectos políticos que nada tienen que ver con nuestros valores fundacionales. Rechazamos cualquier posibilidad de acuerdos con partidos políticos como La Libertad Avanza, el Pro y el Peronismo”, puntualizó, en contraposición a las alternativas que exploran otros sectores del radicalismo bonaerense, incluso el del oficialismo encabezado por el senador nacional Maxi Abad.

La decisión de ir con boleta propia condiciona el armado de la UCR en la Quinta Sección, habida cuenta que en la Provincia no están habilitadas las listas colectoras. Por caso, si la UCR termina integrando un frente -¿con los libertarios y el Pro?- en el distrito tandilense competirá contra la lista radical del gobierno municipal de Lunghi.

Cambios de reglas y concejales que esperan la sanción en Diputados

Parecía una puerta totalmente cerrada pero una rendija comenzó a cristalizarse y, de confirmarse, ya muchos se preparan para ponerse el traje de candidatos. El Senado bonaerense aprobó esta semana la modificación de la ley electoral para habilitar las reelecciones indefinidas de los legisladores provinciales, concejales y consejeros escolares, en una decisión que llega a poco más de tres semanas del cierre de listas y a la espera que Diputados ratifique la sanción de la ley.

La votación en la Cámara Alta se definió con el desempate de la vicegobernadora Magario, luego de un 22 a 22 que arrojó novedades. Entre los positivos se anotaron dos senadores de Unión, Renovación y Fe, el bloque de exlibertarios que rompieron con Milei antes de asumir tras haber sido electos por La Libertad Avanza, mientras que la abstención de la libertaria full Silvana Ventura habilitó el desempate. En contra estuvieron el Pro y la UCR, pero también la massista Sofía Vanelli, mientras que se ausentó Federico Fagioli de Patria Grande -el espacio de Juan Grabois-, quien estaba en contra.

La situación legislativa de las reelecciones lleva una historia reciente de nueve años de manoseos y marchas y contramarchas. En 2016, la gobernadora Vidal contó con el apoyo del Frente Renovador de Sergio Massa para aprobar una ley que limitó a dos los mandatos consecutivos para gobernadores, legisladores, intendentes, concejales y consejeros escolares. La elección de 2021 fue la primera donde rigió la medida, ya que se tomó como primer mandato el que estaba en curso al momento de la sanción de la ley.

Pero a fines de 2021 la Legislatura dictó una nueva ley para habilitar la reelección por más de dos mandatos por única vez, al interpretar que se tomaba como primer mandato el correspondiente al período 2019-2023, con el pretexto de si se tomaba el que había iniciado en 2015 se estaría legislando hacia atrás. Allí el Pro y el massismo se opusieron, mientras que el radicalismo aportó una cantidad importante de votos que habilitó la reelección de muchos intendentes del peronismo pero también de la propia UCR en 2023. Ahora, a días del cierre de listas, se cambian las reglas de juego para el 2025, y no pocos ya especulan que todo se encamina a que el debate resurja dentro de dos años, cuando haya que salvar a los intendentes, ya que la nueva ley solo alcanza a legisladores.

Mientras tanto, cinco concejales esperan desde Mar del Plata que Diputados confirmé la media sanción del Senado. Son aquellos ediles que ya tienen dos mandatos cumplidos (2017-20921 y 2021-2025) y que de otro modo no se podrán presentar en estas elecciones para renovar su banca. Y hay de todos los colores: Guillermo Volponi y Mercedes Morro del bloque Vamos Juntos, Angélica González de la Coalición Cívica, Ariel Ciano del Frente Renovador y Virginia Sívori de Unión por la Patria.