El Colegio de Martilleros consideran que hay que “escuchar” a los vecinos de Parque Luro

15 de Octubre de 2012 21:15

Por Redacción 0223

PARA 0223

En medio del conflicto que se desató en Parque Luro a raíz de que el gobierno municipal propuso que las 250 viviendas que se construirán en Mar del Plata a través del programa Procrear se instalen en la “Canchita de los Bomberos”, el único espacio verde en el sector, el titular del Colegio de Martilleros local, Miguel Ángel Donsini, consideró que se debe “escuchar a los vecinos” de esa zona antes de avanzar en el proyecto. 
En declaraciones a Radio Residencias, Donsini se refirió al malestar que generó en Parque Luro la información de que el municipio busca emplazar en la “Canchita de los Bomberos” los más de 200 dúplex que se construirán en el marco del plan Procrear, impulsado por el gobierno nacional. 
En ese sentido, y al igual que los representantes del Colegio de Arquitectos, sostuvo que “este es un tema que hay que llevar al Plan Estratégico, donde están todas las instituciones” pero, además, “hay que consultar y escuchar a todos los vecinos”. 
“Hay que explicarle a la gente cuál es el proyecto que se va a hacer en ese, que es un sector muy importante e interesante de la ciudad”, remarcó. En la misma línea, evaluó que “Mar del Plata necesita espacios verdes” y reparó en que el predio que la gente de ese barrio busca preservar como espacio verde “está alrededor de un museo (de Arte Contemporáneo) que va a ser orgullo de la ciudad y atraerá al turismo cultural”. 
En consecuencia, Donsini insistió en la necesidad de “consulta a los técnicos de la ciudad y, fundamentalmente, a los vecinos”. Luego de que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunciara la creación de 250 viviendas en Mar del Plata, en el marco del Programa Crédito Argentino del Bicentenario-Procrear, el gobierno de Pulti propuso que los monoambientes y dúplex que demandarán una inversión de $ 96.565.239 se construyan en un sector de Parque Luro, en la denominada “Canchita de los Bomberos”. 
La medida dispuesta por el Ejecutivo municipal generó el rotundo rechazo de los vecinos del barrio, quienes desde hace más de 20 años piden que ese espacio sea destinado a una plaza pública, ya que en la zona no existe ningún espacio verde.