Historia pura: ¡Aldosivi es de primera!

En Córdoba, el equipo de Mar del Plata venció a Gimnasia de Jujuy 1 a 0 y por primera vez en 102 años de vida logró el ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino.

Aldosivi hizo historia.

15 de Diciembre de 2014 22:48

Enviado especial a Córdoba

Aldosivi dio la talla en el partido más importante de su historia. En Córdoba, sin el apoyo de sus hinchas, con jugadores averiados y un trajín de partidos encima agotador, jugó "su" final como debía para imponerse 1 a 0 ante Gimnasia de Jujuy, en el segundo partido del triangular desempate de la B Nacional. Así, el "Tiburón" se metió en la historia grande del deporte de Mar del Plata: desde febrero, y por primera vez en sus casi 102 años de vida, jugará en la máxima categoría del fútbol argentino.

El gol tempranero de Ángel Vildozo, en una gran acción colectiva y mejor definición, le dieron el triunfo cuando el empate ya le alcanzaba al "Tiburón". Festeja el puerto, festeja gran parte de la ciudad.

Un primer tiempo que se dio a la perfección para Aldosivi, pese a que comenzó torcido: Pablo Lugüercio, al minuto nomás, empezó a sentir molestias en la zona costal, y a los 5´ lo reemplazó López Macri. Un cambio gastado muy rápidamente, con el "Payaso" que hizo lo posible para estar, aunque quedó en claro que no tendría que haber jugado.

De entrada los dirigidos por Fernando Quiroz se posicionaron en territorio contrario. Y en su primera avance serio, lograron golpear más rápido de lo esperado. A los 8´ el recién ingresado López Macri metió un magnífico cambio de frente para Seccafién, quien se hamacó con la pelota por el vértice izquierdo del área, utilizó a Canever y su pasaje a fondo para "despistar" y metió un centro-pase perfecto para que Vildozo, por detrás de todos, conectara de cabeza. Festejadísimo gol del "9", que luego realizó una enorme tarea individual y colectiva.

En la reanudación, Aldosivi siguió manejando la pelota. Gimnasia acusó el impacto. De aquel abrazo colectivo de confianza antes del pitazo inicial, a un equipo partido, nervioso y que perdió siempre con cada jugador marplatense. El "Tiburón" controló con orden. Promediando los 20 minutos se retrasó y los jujeños obligaron a la atención con varios centros, pero siempre la zaga y los laterales respondieron para despejar y anticipar.

A los 26´ Lamberti tomó un despeje rival en el círculo central y puso un pase profundo para la corrida de Carranza, que se demoró pero dentro del área, con una marca encima, sacó un remate a las manos de Cavallotti. Siete minutos después, el fino Seccafién enganchó para su zurda, sacó un disparo fuerte, el arquero atajó pero la pelota lo sobró, dio un pique y se fue apenas encima del travesaño. Los pocos marplatenses gritaron gol. De ese tiro de esquina, Díaz cabeceó a las manos del "1".

El tramo final del primer tiempo se profundizó con un Aldosivi impecable para recuperar la pelota (Lamberti y Galván estuvieron impasables). Vildozo aguantó cada pelota recibida con inteligencia, en cualquiera de las esquinas. Seccafién fue auxilio de pase, y López Macri hizo un gran desgaste para colaborar en el retroceso. Sin compromiso en el marcador, sólido como equipo y más aún de la cabeza, Aldosivi se fue al descanso ya saboreando el ascenso.

El complemento continuó siendo de Aldosivi. Gimnasia de Jujuy buscó variantes, pero no logró mejorar su floja performance. Ereros, jugador de gran técnica, nunca gravitó y su equipo lo sintió. El "Tiburón" estuvo atento para ocupar los espacios, en un desgaste formidable para no permitir reacción alguna de su rival.

A los 20´ Seccafién recibió por izquierda de Vildozo, tras robo de Lamberti, gambeteó, fue a  fondo y su centro para Carranza -estaba solo para definir- fue interceptado por Cavallotti. Fue la primera llegada del complemento de los dos equipos. Siete minutos después, Desvaux metió un cabezazo apenas afuera pero bien controlado por Campodónico.

Quiroz cambió aire con el ingreso de Miracco por López Macri, y Gimnasia agotó sus variantes para tener mayor profundidad. Pero el elenco del norte fue un cúmulo de nervios. Sin claridad, solo complicó con centros.

A los 31´ se dio una acción increíble. López Macri se llevó la pelota desde el círculo central en soledad, en una carrera interminable y con la defensa rival entregada, pero el exInstituto no pudo eludir al arquero, desperdiciando el dos a cero.

De allí hasta el final, Aldosivi defendió con las últimas gotas de sudor. La impotencia de Gimnasia se acrecentó, y el pitazo final de Pitana marcó el epílogo de una noche histórica y heroica del "Tiburón", que ya es de primera.