Los papás del nene mutilado piden que el robo de cadáveres sea considerado delito penal

Se concentraron este viernes en el Concejo Deliberante de Miramar. Los ediles de esa localidad se comprometieron a elevar un pedido formal ante la Legislatura para que se modifique el Código Penal, que contempla la extracción de cadáveres como una contravención.

19 de Mayo de 2017 20:28

Por Redacción 0223

PARA 0223

Los papás de Matías Valentino Fernández, el nene que falleció tras un accidente doméstico en El Boquerón y cuyo cuerpo fue robado del cementerio de Comandante Nicanor Otamendi, mutilado y luego abandonado a la vera de la ruta 11; marcharon este viernes al Concejo Deliberante de Miramar para pedir que se impulse un proyecto para que la sustracción de cadáveres sea contemplado como un delito penal. El planteo responde a que el Código Penal solo considera delito si la extracción del cuerpo tuvo fines de lucro, es decir, si la persona que lo sacó entregó dinero a cambio de ello, las actuaciones podrían pasar a la órbita de la Justicia Correccional.

Ver además: Nene mutilado: si el cadáver no se vendió no existe delito

Acompañados por integrantes de la Unión de Trabajadores de la Tierra y otros allegados, los padres del menor fueron recibidos por los concejales de esa localidad que se comprometieron a realizar un pedido formal ante la Legislatura para que se modifique el Código Penal.

“Es inminente que la fiscal a cargo de la investigación, Ana María Caro, cierre la causa y gire las actuaciones al ámbito contravencional. Es decir, si se condenara a alguien por este hecho aberrante,  sólo debería pagar una multa”, advirtió Marcela González, abogada de los padres del chiquito.

En ese sentido, consideró que el hecho que conmocionó a todo el país “debería ser tomado como caso testigo” para avanzar en la modificación de la ley.  “Profanar una tumba, robar un cadáver, mutilarlo y abandonarlo van en contra de los valores de cualquier persona y merece ser condenado”, enfatizó la letrada.

“Esta familia perdió a su hijo en un episodio trágico –se ahogó al tragarse una bombucha-, lo enterró y pocos días después lo tuvo que volver a cremar. Estos papás necesitan justicia en medio de tanto dolor que vienen pasando”, exigió por último.

El macabro hallazgo se produjo el 21 de marzo, cuando un hombre advirtió que un perro husmeaba sobre un cuerpo que se encontraba al costado de la ruta que une Miramar y Mar del Sud. Una semana más tarde, los investigadores pudieron identificar a la víctima: era el cuerpito de Matías Valentino Fernández, un nene de 2 años que había fallecido el 10 de marzo en su casa de El Boquerón tras atragantarse con un globo de agua. Al cadáver le faltaban las extremidades y la totalidad de los órganos y piezas dentarias. Por el hecho, fue imputado por falso testimonio y encubrimiento el sepulturero del cementerioJuan Carlos López.