Condenan a Cristian Aldana a 22 años de prisión por corrupción de menores

El exlíder de la banda musical “El otro yo” recibió una condena tras el proceso judicial en el que se comprobó el delito de corrupción de menores en cuatro de los siete casos denunciados.

12 de Julio de 2019 21:14

Por Redacción 0223

PARA 0223

Cristian Aldana fue condenado esta tarde a 22 años de cárcel, por el juicio en el que se lo acusaba del delito de abuso sexual y corrupción de menores. El músico, detenido en el sector de presos sexuales de Marcos Paz desde 2016, era acusado de haber violado a siete menores a las cuales había captado aprovechándose de su fanatismo hacia la banda.

La sentencia fue comunicada por el Tribunal Oral Criminal Nº25 de la Ciudad de Buenos Aires, luego del juicio que duró más de un año. Se comprobaron cuatro de los siete casos de los que el artista era acusado, debido a que los jueces Bustos Lambert y Goerner consideraron que dos casos habían prescripto y uno de ellos había sido desestimado previamente. Por el contrario, la jueza Dieta de Herrero votó en disidencia a la condena de 22 años, pidiendo por 35 años en los que se contemplaran los cargos por abuso sexual, que no se tuvieron en cuenta para la sentencia.

Mientras que el fiscal del caso, Guillermo Pérez La Fuente, y la defensa de las víctimas habían solicitado penas de 35 y 40 años de cárcel, respectivamente, la condena fue de tan sólo 22 años. Por otra parte, se le ordenó al músico la entrega de una muestra de ADN para su inclusión en el Registro de Datos Genéticos del Ministerio de Justicia.

 

 

El proceso penal venía desarrollándose desde mayo de 2018, a raíz de las denuncias de siete mujeres que acusaron al músico de abusos perpetuados en el periodo que va desde 1999 hasta 2010, cuando las víctimas tenían entre 13 y 16 años. Las denunciantes también detallaron en sus declaraciones haber sufrido agresiones físicas y la transmisión de enfermedades sexuales.

Aparentemente estas jóvenes solían ser fanáticas de la banda que lideraba Aldana, quien las contactaba por teléfono o redes sociales y las llevó a tener relaciones sexuales con él.

Se trata de una condena histórica, ya que es la primera vez que se condena a un músico condenado a prisión por abuso sexual de sus seguidores en el ámbito del rock nacional.

Por otra parte, el músico denunció que se buscaba condenarlo como un “trofeo de guerra”:“Estoy convencido de que antes de que arranque el juicio yo ya estaba condenado, porque lo mío es una condena mediática, no solo judicial”.

Durante una audiencia que tuvo lugar horas antes a que se diera a conocer el veredicto, el ex integrante de El Otro Yo se presentó con un cartel que expresaba la frase “Sin defensa no hay juicio”, y sostuvo su inocencia diciendo “no soy ni un violador ni un acosador, ni un violento; es mentira”. Sin embargo, luego no se hizo presente en el momento de la lectura de la condena.