Clausuran un frigorífico de Mar del Plata por tirar sangre de animales a las napas de agua

El procedimiento lo encabezó personal de la delegación municipal Norte en el predio ubicado en el kilómetro 387 de la Ruta 2, después de una denuncia que hizo Obras Sanitarias.

27 de Julio de 2019 12:48

Por Redacción 0223

PARA 0223

La delegación norte de la Municipalidad avanzó este sábado por la mañana con la clausura del frigorífico de Mar del Plata después de una denuncia de Obras Sanitarias (Osse) en la que se advierte el derrame de sangre de animales hacia algunas de las napas de agua subterráneas que abastecen a la ciudad.

Fuentes oficiales le confirmaron a 0223 los resultados del procedimiento que se llevó adelante en las últimas horas. En principio, el accionar del área que está a cargo de Emilio Sucar Grau se dio en el marco del cumplimiento a la ordenanza de habilitaciones 20.054.

Es que el predio ubicado en el kilómetro 387 de la Ruta 2 ya había sido clausurado con anterioridad pero seguía funcionando, pese a no tener la habilitación correspondiente. "En realidad se re-clausuró. Las agentes que fueron hoy constataron que había actividad y por eso se tomó esta decisión", explicaron las fuentes.

El operativo también contó con presencia de autoridades de Senasa y la Autoridad del Agua, en base a la grave presentación que hizo en las últimas horas Osse a la Fiscalía de Delitos Económicos Ambientales.

Personal de la Gerencia de Producción de la empresa que se desempeña en la zona advirtió el derrame de sangre sobre napas y a partir de esta irregularidad se inició una denuncia penal que debe investigar la Justicia.

En un relevamiento por el frigorífico, el cuerpo de Inspectores de la firma estatal labró un acta de constatación Nº 519619 por observarse deficiencia en el tratamiento de los efluentes, lo cual significa una infracción legal al Artículo 7 de la Ordenanza 24.119.

Osse había informado que tambien se advirtió un desborde del efluente de piletón de tratamiento, lo que provocó una "importante cantidad de barros caídos a la cava lindera y un campo inundado".

"Posteriormente, se realizó una inspección en el establecimiento frigorífico, comprobando que se desmoronó  el lateral del piletón de tratamientos de efluentes. No se observó impermeabilización en el talud desmoronado. Desde camino lindero  se observó vuelco con gran caudal  con caída tipo cascada hacia la cava. De esta forma, se tomaron muestras para analizar en el Laboratorio de OSSE y fotografías para dejar constancia", según se detalló.

En este sentido, desde la empresa que preside Alejandro Pozzóbon se aseguró que se impulsó la investigación de estos hechos con la "absoluta convicción de que las acciones de fábricas y establecimientos industriales bajo ningún punto de vista pueden omitir lo establecido en las normas y que se debe resguardar el interés de toda la comunidad por preservar los recursos naturales".

 

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