La última gira de Macri

Mauricio Macri comienza lo que tal vez sea su su última gira internacional. El destino es Nueva York y tendrá al menos tres objetivos a la vista que giran en torno a sus intenciones de llegar competitivo a las elecciones del 27 de octubre. 

En primer lugar, participará de la Asamblea General de las Naciones Unidas que puso como agenda prioritaria la lucha contra el Cambio Climático que busca ir un paso mas en un debate que dividió las aguas luego de la crisis en el Amazonas  en la que Jair Bolsonaro denunció la conspiración de las potencias del G7 contra el país que preside. 

La tensión de Emmanuel Macron con su par brasileño y la aparicion de la jóven activista sueca Greta Thunberg como representante de una generación preocupada por el futuro del medio ambiente ubican la "emergencia climática" más fuerte que nunca en el plano global. Un audio del General Santa Rosa divulgado por The Intercept en el que dice: "En la frontera occidental de Siberia tiene más chinos hoy que cosacos. Rusia está despertando ante un problema de seguridad nacional muy grave. Tenemos que despertar aquí antes de que ocurra el problema, ", demuestra el pensamiento del gobierno brasilero. El mismo Bolsonaro advirtió que su mensaje ante el pleno de la ONU traerá reacciones.

En este aspecto, Mauricio Macri no tendrá mayores inconvenientes en adherir a la idea de aumentar el compromiso para reducir gases efecto invernadero dado que desde su gestion como jefe de gobierno porteño adhirió a la "agenda verde". No obstante, Thumberg denunciará a la Argentina como parte de las 5 naciones que más contaminan el planeta, algo que nadie le puede endilgarle a Macri.

Por otra parte, otro de los ejes de Macri serán Malvinas, Venezuela e Irán en el que resaltará la necesidad de que Maduro abanbdone el poder en el pais caribeño y condenará el accionar de Irán y Hezbolah, a quien recientemente la considero como organizacion terrorista. A propósito de la crisis venezolana, se baraja la posibilidad de un encuentro con Michelle Bachelet, Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, que emitió un duro informe contra el gobierno de Nicolás Maduro. Si bien Macri y Bachelet tienen diferencias en relación a la forma de abordaje de la crisis, el convite sirve para seguir profundizando la retórica contra la administración chavista.

La relevancia del viaje presidencial no radica en su intervención en la ONU sino en la capacidad para demostrar que no es un presidente de salida, lugar al que fue relegado luego de la contundente derrota en las primarias.  Ante una elección general complicada y luego de las recepciones de "Jefe de Estado" recibida por su contrincante en España, Portugal, Perú y Bolivia,  Macri necesita mostrarse activo en la agenda internacional. 

En ese contexto, se espera que el mandatario se reúna con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump y el Jefe de Estado chino, Xi Jinping. El estadounidense es su principal sostén, especialmente ante el FMI, y el asiático no deja de ser socio estretégico integral desde el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y que, en caso de concretarse en el encuentro, no arrojará más novedades que la prudencia que el gigante de oriente en cuanto a los tiempos políticos en pos de la defensas de sus intereses en nuestro país que, de por sí son muchos y pretenden seguir creciendo con un eventual cambio de gobierno. 

¿Habrá algo más detrás de la foto? En principio y para un liderazgo erosionado como el de Macri, una foto con las dos potencias mundiales sumando a algunas promesas de inversión que puedan meter en la valija de regreso, no es para nada despreciable. Otro interrogante será si Macri podrá reunirse con algún referente de la Unión Europea luego de los encuentros de Alberto Fernández con Pedro Sanchez y Antonio Costa. En ese punto, Macri tiene un dilema: mostrarse con Macron en plena tension con Bolsonaro o seguir aferrado a la figura del lider brasilero que hoy aleja más de lo que aglutina. En rigor de verdad, Macri deberia optar por preservarse a si mismo.

El tercer elemento es el mas importante en el corto plazo y se desarrollará por fuera de las instalaciones de las Naciones Unidas. Será en las oficinas del Fondo Monetario Internacional y tendrá alministro de Hacienda Hernán Lacunza y el presidente del Banco Central, Guido Sandleris, con la dificil mision de convencer al organismo multilateral de credito de autorizar el desemoblso de 5400 millones de dolares. 

Fuentes consultadas para esta columna indican que Estados Unidos no pueden hacer más de lo que ya hizo para convencer al bloque europeo en el directorio y por eso, lo más sensato es esperar el resultado de las elecciones generales para tomar definiciones. "¿Qué gana el FMI negociando con un gobierno de salida?", agregó.  Esto es un problema para un gobierno que todos los días pierde reservas internacionales para controlar el tipo de cambio.

De esta forma, Mauricio Macri, llevará a adelante una agenda tan intensa y corta como determinante para sus sueño de continuar siendo el presidente de todos los argentinos y evitar que el mundo al que tanto aspiró a formar parte le haga la despedida. Es que para muchos de ellos, la elección ya sucedió.