Montenegro solicitó que los comercios gastronómicos puedan vender comida para llevar

Se trata del séptimo pedido que realizó el intendente a la Provincia de Buenos Aires. Qué otros sectores analiza para habilitar.

Imagen: Archivo 0223 - Guillermo Montenegro le pidió a Axel Kicillof habilitar el servicio de "take away" para los comercios gastronómicos.

28 de Abril de 2020 19:49

Por Redacción 0223

PARA 0223

El intendente Guillermo Montenegro elevó un nuevo pedido a la Gobernación de la provincia de Buenos Aires para permitir que los comercios gastronómicos de la ciudad puedan vender comida para llevar en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio que se dispuso por la pandemia de coroanvirus.

Durante la jornada del martes, el jefe comunal había avanzado con los solicitudes a la administración de Axel Kicillof para poner en marcha de nuevo seis actividades que engloban a agrimensores, profesionales de las ciencias económicas, martilleros, arquitectos, pinturerías y tejido de punto. Sobre el cierre de la tarde, Montenegro formalizó un séptimo pedido: la venta de comida a través de la modalidad "take away".

Después de recibir el pedido de cada sector, desde la comuna se solicita la elaboración de un protocolo que deberá cumplir cada trabajador interviniente en el proceso, desde que sale de su casa y hasta que regresa. El mismo luego es validado por la Secretaría de Salud y –posteriormente- es elevado al gobierno de la provincia de Buenos Aires, quien es el que define la aprobación.

En este momento, también se está analizando las solicitudes de obras privadas (a terminar), la industria en general; peluquerías y estética; talleristas en general; tatuadores; viveros; gimnasios y afines; vinotecas y concesionarias de autos, entre otras.

Desde el sector habían mostrado su preocupación por el parate económico que genera la cuarentena. Si bien la mayoría de los empresarios del rubro logró abonar los salarios de marzo, desde el sector avizoran serias dificultades para afrontar los sueldos de los trabajadores en abril.

Según habían planteado semanas atrás, el servicio de reparto "no sirve para nada" porque no alcanza a cubrir ni el 10% de la facturación habitual de los comercios. Incluso, los empresarios vaticinaron que los negocios se fundirán en poco más de un mes y que al menos diez mil familias se quedarán en la calle.