La Catedral de Mar del Plata reabrirá sus puertas este jueves

Los fieles podrán ingresar para rezar u orar y para confesarse con algún sacerdote, cumpliendo el protocolo sanitario que exigen las autoridades por la pandemia del Covid-19.

13 de Mayo de 2020 08:36

Por Redacción 0223

PARA 0223

La Catedral de Mar del Plata reabrirá sus puertas a los fieles el jueves después de que el Gobierno nacional acordara con la cúpula de la Iglesia católica la apertura de los templos solamente para asistencia espiritual en el marco de la vigencia del aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto por el coronavirus.

El Obispo de la ciudad, Monseñor Gabriel Mestre, se lo confirmó a 0223 aunque aclaró que todavía restan definir algunos detalles con respecto al horario de funcionamiento en base al protocolo que deberá cumplirse en base a las exigencias que plantean las autoridades sanitarias por la pandemia del Covid-19.

En principio, según lo que dejó trascender el referente religioso, las puertas de la Catedral permanecerán abiertas a la mañana desde las 10 hasta las 12 y a la tarde desde las 15 hasta las 17 aunque habría posibilidad de que se pueda ampliar el tiempo de visita.

Este miércoles, con la colaboración de personal voluntario, se realizarán tareas de limpieza en las instalaciones del templo y se terminarán de diagramar algunos puntos finales del protocolo de bioseguridad, que es similar al que deben implementar los comercios y que tiene como eje principal evitar las aglomeraciones dentro de espacios físicos reducidos.

"A diferencia de lo que sucedía antes, sabemos que tendremos que disponer de personas siempre para poder controlar el ingreso porque se puede correr el riesgo de que un grupo grande de personas se quiera meter sin cumplir con las medidas que se necesitan en este contexto", explicó Mestre.

El titular del Obispado local precisó que la Catedral estará abierta para todos aquellos fieles que quieran rezar u orar y eventualmente hacer una confesión con un sacerdote. "En este último caso, se van a respetar todas las medidas protocolares y una distancia prudencial", remarcó.

"Esta instancia implica una apertura parcial de los templos porque todavía no podemos incluir ninguna celebración de misas o de bautismos y casamientos. Sabemos que por muchísimo tiempo no vamos a poder hacer eso. Pero entendemos que esta asistencia espiritual al fiel no va a generar ninguna dificultad ni va a requerir de una mayor protocolización", consideró.