San Cayetano: postales de una celebración diferente

El 7 de Agosto suele ser una fiesta que asegura la presencia de miles de feligreses en la Parroquia de San Cayetano, que se acercan al lugar para pedir o agradecer al santo patrón del pan y el trabajo. Pero, este año, debido a la pandemia, la celebración cambió su forma.

Pese a que el establecimiento de culto se encuentra cerrado al público, hay quienes no quieren dejar de lado la tradición de orar en el templo y se acerca a la puerta para realizar su pedido o agradecimiento.

En un contexto inédito, el padre Juan Pablo Cayrol, párroco de San Cayetano asegura que  cuando comenzó el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, desde la institución pensaron que para esta fecha, la cuarentena habría terminado. “Pero nos toca acomodarnos a estos tiempos”, dijo el sacerdote.

El padre Cayrol asegura que la sociedad desarrolló el "don de la amistad" con San Cayetano

Fue por eso que junto con el Obispo Gabriel Mestre decidieron iniciar la campaña “Celebrá en tu casa” y así evitar la multitudinaria concentración que se vive año a año en el lugar.

Este año, del culto religioso participan representantes de los distintos sectores del mundo del trabajo, desocupados, algunos dirigentes y autoridades, en estricto cumplimiento de las disposiciones y protocolos vigentes. En tanto la Santa Misa se realizará únicamente vía on line y se transmitirá a través de las redes sociales.

La celebración puede seguirse por streaming

Consultado sobre el motivo de la popularidad del santo, Cayrol expresó que la sociedad argentina y la marplatense en particular desarrolló un “don de la amistad”, con el patrono del pan y el trabajo. “San Cayetano no es un santo más. En ese orden se vive esta fecha”, dijo el párroco..

Por su parte, Carlos, un clásico vendedor ambulante que ofrece espigas de trigo en cada celebración aseguró a 0223 que lleva 32 años vendiendo espigas acá y nunca se vio esto”, dice a 0223.

Para Carlos, tradicional vendedor ambulante de la celebración, este año "Falta el humo"

 "Venir y que no haya nadie es raro. Falta el humo", concluyó.