Cárcel para Gustavo Demarchi: "El reclamo sigue vivo y se seguirá exigiendo"

Lo aseguraron desde Abuelas de Plaza de Mayo, a poco más de un año de la domiciliaria que se le concedió al genocida. "Hay una justicia que sigue funcionando y otra que tira del otro lado de la cuerda para generar impunidad", apuntaron.

10 de Enero de 2021 17:01

Por Redacción 0223

PARA 0223

Abuelas de Plaza de Mayo de Mar del Plata aseguró que persiste en la lucha para que Gustavo Demarchi, el genocida condenado a fines del 2016 a prisión perpetua por seis asesinatos cometidos con la Concentración Nacional Universitaria (CNU), vuelva a la cárcel común y abandone el beneficio de la prisión domiciliaria que la Justicia le concedió hace poco más de un año.

"El reclamo sigue vivo y vigente y se va a seguir exigiendo hasta que haya una respuesta concreta", ratificó en primera instancia a 0223 Fabián Muñoz, representante de la organización, quien también aseguró que aún se aguarda por la resolución de un recurso extraordinario por el fiscal de Casación interviniente en la causa por delitos de lesa humanidad.

El hijo de la referente de Abuelas, Carmen Ledda Barreiro, consideró que la medida con la que fue beneficiado el exlíder de la CNU "fue parte de una Justicia que otorgó domiciliarias de manera indiscriminada". "Sabemos que la prisión domiciliaria es un recurso legítimo y nosotros lo defendemos porque hace valer los derechos humanos cuando el sistema de salud del servicio penitenciario no puede contener al condenado. Pero el caso de Demarchi no fue así", aclaró.

En este sentido, Muñoz recordó que Demarchi, quien cumple la condena ubicado en un departamento de la zona de Güemes, solamente había acusado un esguince de tobillo al momento de salir de la cárcel. "Fue una burla grotesca", apuntó, y sostuvo: "Nosotros y el resto de los organismos de derechos humanos no abandonamos la reivindicación de que los genocidas tienen que permanecer en prisión y que las domiciliarias no tienen que ser medidas políticas sino un recurso extremo".

El referente marplatense de Abuelas de Plaza de Mayo también reveló que el exfiscal federal tuvo "otros inconvenientes físicos" en el último año. "Tenemos el deseo de que haya un equilibrio y que lo que dicta la ley y la justica sea equilibrado y no lo que es ahora, que es grotesco y absurdo, como sucede con el caso Demarchi", denunció.

Muñoz, en sintonía con otros planteos críticos que lanzó el Gobierno contra la Corte Suprema de Justicia de la Nación, lamento que "haya una Justicia que sigue funcionando y otra que tira del otro lado de la cuerda para generar impunidad". "Hay que corregir muchas cosas y mejorar la calidad del servicio de Justicia", instó.

En última instancia, el hijo de Ledda también celebró la sentencia en el juicio conocido como "CNU II" que dictaminó el Tribunal Oral Federal de Mar del Plata, compuesto por los jueces Enrique Méndez Signori, Daniel Obligado y Nicolás Toselli, en donde se estableció una condena a cadena perpetua contra el represor Eduardo Salvador Ullúa y a cinco años de prisión para Héctor Oscar Corres, ambos integrantes de la organización criminal que lideraba Demarchi.

"Aunque hubo pocos años para Corres, es importante porque finalmente hay una muestra de condena y la prisión perpetua para Ullúa consideramos que es un castigo ejemplar para cerrar esta etapa de la causa", fundamentó Muñoz.

Además, el referente de Abuelas recordó que, de cara a futuro, el accionar nefasto de la CNU todavía será motivo de un largo trabajo para la Justicia Federal: se espera por la realización de un tercer juicio en el que se investigarán 25 homicidios. "Hay muchas ramificaciones en esta causa. Lo más importante es que los procesos de lesa humanidad no se hayan detenido por la pandemia", concluyó.