La nueva vida de Sebastián Melo, el héroe marplatense que devolvió 28 mil dólares

A casi un año del gesto que le mereció un millonario reconocimiento en Mercado Pago, el hombre dejó el taxi para trabajar en una distribuidora que le permite pasar más tiempo con León, su hijo diagnosticado con una extraña enfermedad cardíaca. "Mi casa es una terapia intensiva", revela, a 0223.

"Mi único sueño es que mi hijo tenga salud", asegura el trabajador de 41 años.

12 de Diciembre de 2021 08:00

Por Redacción 0223

PARA 0223

Sebastián Melo aprendió a abrazar siempre a la vida, sin exigir nada a cambio, venga como venga. Nunca soñó con encontrar en el asiento trasero de su taxi un bolso con 28 mil dólares, ni imaginó después que recibiría 2 millones de pesos de Mercado Pago por haber devuelto la plata que no era suya. Y muchos años antes, tampoco esperaba escuchar en boca de médicos el diagnóstico de la extraña enfermedad cardíaca que le condicionaría la vida a su único hijo.

Sebastián vive por y para León, su hijo de tan solo tres años. Dice que su casa es, literalmente, una “terapia intensiva” a raíz de todos los cuidados que hay que extremar por la tetralogía de fallot, la afección con la que fue diagnosticado el niño, prematuramente, al quinto mes de embarazo. “Acá hay camisolines, guantes, los terapistas usan máscaras y las enfermeras tienen sus zapatos para usar solo adentro de los cuidados”, grafica el marplatense.

La particularidad del cuadro que afecta a León es que no se trata de una sola enfermedad sino de tres al mismo tiempo: al practicarle una ecografía trasnucal, los médicos advirtieron desde el vientre materno que el bebé tenía una aurícula más chica, una arteria pulmonar diminuta y que la vena aorta se encontraba en el medio del corazón, en vez de entrar normalmente por un ventrículo y salir por una aurícula.

Por eso, el chico debió atravesar tres cirugías “reparativas” de alta complejidad desde su nacimiento para mejorar su calidad de vida. “León no podía nacer en Mar del Plata y nos dieron la opción de Buenos Aires así que estuvimos allá veinte días antes de que nazca. A los veinte días tuvo la primera cirugía de corazón, después hubo otra a los seis meses y una más l año, y todo este tiempo tuvimos que estar con él. Éramos León, mamá y papá. Nadie más”, recuerda Sebastián.

El año de nacimiento de León resultó tan traumático que el hombre no pudo trabajar para abocarse de lleno al cuidado del nene. “Como nos habían adelantado el diagnóstico, nosotros igual fuimos guardando algo y todo lo que llegamos ahorrar en su momento fue para León. La familia nos ayudó mucho para poder mantenernos durante esos meses”, resalta el trabajador de 41 años.

Al hijo de Sebastián todavía le quedan una cirugía por delante en los próximos dos años para continuar con el tratamiento. En los últimos meses, también se sometió a una traqueotomía y luego le colocaron un botón gástrico para que pueda comer. “Hasta el botón, se estaba alimentando con una sonda. Ahora se puede alimentar bien pero no se le escucha la voz”, comenta.

Nuevo tiempo

Durante más de 15 años Sebastián Melo estuvo manejando un taxi para llevar un plato de comida a su familia. Fue la salida que encontró, después de probar varios trabajos sin éxito: hizo una temporada en una clínica, también en un reconocido café, pero nunca pudo quedar fijo y se volcó por el trabajo al volante.

Sebastián Melo, un trabajador incansable.

“A veces podía pasar entre 14 y 16 horas arriba del taxi. El problema de esta actividad es que no tiene un ingreso muy regular. Quizás, en un mes, uno puede hacer 40 mil pesos pero al siguiente hace 20 mil pesos y en el otro recauda 30 mil pesos y así… no hay estabilidad”, explica, en una entrevista con 0223.

Ahora, por fin, después de tanto esfuerzo y meses de búsqueda, Sebastián puede hablar de un trabajo estable. El taxi se volvió cosa del pasado para él porque hace pocas semanas, a mediados de noviembre, empezó a trabajar para una distribuidora en Mar del Plata. Pero lo que más le da felicidad no es estar en blanco sino el hecho de poder pasar más tiempo con León.

"Fama" no buscada

A Sebastián Melo lo invade la emoción en la publicidad de Mercado Pago.

Sebastián Melo se ha vuelto uno de los “héroes populares” de Mar del Plata en los últimos tiempos, desde que en enero de este año le devolvió a una pasajera que subió a su taxi un bolso con 28 mil dólares, monto que la mujer necesitaba para un tratamiento médico. Pero días atrás, volvió a estar en boca de todos cuando se lo vio como protagonista de la última publicidad que lanzó Mercado Pago en el marco de la campaña por Navidad.

Al conocer la noticia, la productora Saigón lo contactó y le pidió algunos detalles de la historia. Entonces, el hombre mandó un video de un minuto contando lo que había hecho y finalmente fue confirmado para la iniciativa publicitaria. “Grabamos un día en Mar del Plata y tres días en Buenos Aires. Fue difícil para mí, me puse nervioso porque yo no estoy nada preparado para las cámaras y esas cosas”, reconoce.

La publicidad que llevó a Sebastián Melo a la "fama".

Y Sebastián tampoco estaba preparado para recibir la sorpresa que le dio la mayor plataforma de cobros online de la Argentina, regalándole 2 millones de pesos, en retribución por el noble accionar por el que fue noticia en la última temporada estival. “No lo esperé en ningún momento. Sí habíamos hablado que me iban a pagar por los días de filmación pero nunca algo así”, expresa.

El marplatense reconoce que recibió “llamados de todos lados” una vez que se conoció la nueva publicidad. No solo fueron amigos, conocidos y familiares los que lo felicitaron sino también múltiples medios de comunicación, desde Buenos Aires hasta Córdoba. “Yo no busco fama ni nada. Pero estoy contento y trato de disfrutar”, afirma, con humildad.

Sebastián insiste en manifestar un “inmenso agradecimiento” a Mercado Pago por el millonario gesto de reconocimiento. ¿Qué hará con la plata? No es ninguna sorpresa: sí, será para León. “El dinero ya está guardado y es para León. No se discute. Agradezco mucho a Mercado Pago por esta ayuda porque tener una tranquilidad económica frente a estas situaciones es muy importante”, dice, y agrega: “Mi único sueño es tener a mi hijo con salud. Porque la salud es lo más importante. La plata ayuda, sí, pero si no tenés salud, entonces no tenés nada”.