Por primera vez, médicos del Higa participaron de una donación multiorgánica regional

Este fin de semana, el Higa “Dr. Oscar Alende” fue escenario de un proceso de donación que tuvo la particularidad de tratarse de una ablación regional hepática de la que participaron profesionales locales junto a colegas de Buenos Aires. En lo que va del año, es el segundo proceso de donación que se realiza en el nosocomio provincial. 

Gregorina Báscolo Viviani, quien es coordinadora de Procuración de Cucaiba en Mar del Plata junto a Patricio Zanardi, explicó que el procedimiento se realizó de manera conjunta entre profesionales de la salud de esta ciudad -que llevaron a cabo la ablación- y colegas de Buenos Aires, lugar al que luego fueron enviados los órganos. “De esta manera, se evitó que el equipo de Buenos Aires viaje a Mar del Plata, ablacione y vuelva, con los gastos que implica el traslado de recurso humano”, advirtió Báscolo Viviani ante la consulta de 0223. 

La cirugía, que estuvo en manos de la médica Gabriela Del Valle, permitió la extracción de un hígado y dos riñones que pertenecían a un paciente que había fallecido en términos neurológicos y estaba en condiciones de ser donante. “Toda logística la soportó Mar del Plata: la ablación la hizo una cirujana de Mar del Plata, con anestesistas, instrumentadores e insumos provistos por el Cucaiba”, precisó la médica. Tras el procedimiento quirúrgico, el Same se ocupó de hacer el traslado de los órganos desde el hospital al aeropuerto, ya fueron enviados por un vuelo comercial de Aerolíneas Argentinas con destino a Ezeiza. 

“Lo llamativo de esto es que es la primera vez que se hace una ablación regional y deja en evidencia la alta capacitación de los profesionales para hacer ablaciones hepáticas, lo que permite un ahorro económico en cuanto a la logística”, reparó Báscolo Viviani,

Por último, la representante del Cucaiba en la ciudad agradeció públicamente a la familia del donante al entender que “detrás de una donación hay un fallecido y familiares que perdieron a un ser querido pero que entendieron la importancia de la ley 27.447”.