Argentina y su otro rival ante México: el factor mental

26 de Noviembre de 2022 01:42

Lionel Scaloni patea el tablero, deja de lado el "once de memoria" y apela a ajustar piezas desde lo táctico y lo físico para la primera final inesperada ante México, este sábado desde las 16. Antes de lo imaginado, el seleccionado nacional jugará un partido trascendental para su continuidad en el Mundial de Qatar 2022.

Inimaginable una semana atrás, el equipo argentino se encuentra ante una situación límite tras la derrota ante Arabia Saudita. Está obligado a ganarle a los mexicanos para seguir dependiendo de sí mismo y alcanzar la clasificación a octavos de final, a esta altura ya sin importar como primero o segundo. Una nueva caída lo dejaría prácticamente eliminado. Y un empate, en deuda y con dudas matemáticas a futuro.

¿Cuánto jugará esta situación al borde del precipicio en la cabeza de los jugadores y cuerpo técnico?; ¿cómo manejará el equipo los nervios y la ansiedad por volver las cosas a su cauce normal?. Sin dudas, además de México, la Selección deberá superar el factor mental del contexto con el que llega a este partido. Deberá mostrarse recuperado rápidamente desde lo anímico, con convencimiento futbolístico y espiritual, y sin titubear ante un rival a respetar, pero que también es vulnerable en los papeles. Cuando el árbitro italiano Daniele Orsato lance el pitido inicial en el estadio Lusail, también se espera que con el equipo, aparezca en su mejor dimensión Lionel Messi, para golpear la mesa de los mejores y despeje las dudas sobre su estado físico. Su sintonía con Enzo Fernández o Alexis Mac Allister será clave para ello.

La postal segundos después a la derrota con Arabia Saudita se pareció a las de las eliminaciones pasadas en Mundiales. Cabezas gachas y decepción. Pero como dijo Scaloni acertadamente ayer en conferencia de prensa, recordando que siempre dijo que había que estar preparados para el "golpe" cuando "todo era color de rosas": "lamentablemente pasó en un Mundial, por suerte, en el primer partido". 

La Selección argentina se encontró con la derrota después de un largo invicto de 36 partidos, y por primera vez desde 2019, se sintió vulnerable. Un terreno que, desde Rusia 2018, no conocía. El equipo campeón de América, sólido, arrasador, tropezó en el torneo menos adecuado. Sin embargo, depende aún de sí mismo, y esta tarde ante México tiene la oportunidad de demostrar que pese a las ausencias que parecen desdibujarlo -la lesión de Giovani Lo Celso, puntal futbolístico entre Paredes y Messi, es una situación a resolver sin tiempo de trabajo-, detrás hay un equipo preparado y listo para volver al triunfo y encaminarse a pelear hasta lejos por el título mundial.