Cada vez más personas con empleo formal piden alimentos en comedores y merenderos

Lo aseguraron desde un movimiento social. La suba generalizada de precios y el empobrecimiento de la clase media incrementaron la demanda en los espacios populares que implementan listas de espera para organizarse.

La clase media llegó a los comedores y merenderos de Mar del Plata. Foto: 0223.

15 de Septiembre de 2022 07:58

Por Redacción 0223

PARA 0223

El encarecimiento de los alimentos y el empobrecimiento de la clase media, asfixiada por la inflación, incrementaron la demanda en los comedores y merenderos de Mar del Plata. Los espacios comunitarios hacen lo imposible para mitigar el hambre y se organizan en listas de espera.

Los comedores y merenderos dan cuenta de la emergencia alimentaria y exponen una particularidad: la presencia de la clase media que no tiene para comer. La inflación - que en los primeros ocho meses del año alcanzó el 56,4% - empujó a la pobreza a personas y familias de la clase media que, aún con un empleo formal, acuden en busca de un plato de comida para cubrir sus necesidades alimentarias.

El movimiento Barrios de Pie - Libres del Sur Territorial administra 76 comedores y merenderos distribuidos en los barrios más necesitados de Mar del Plata y Batán, donde abunda el hambre. La demanda de raciones se aceleró con la suba de la inflación de los últimos meses y ha llevado a que más familias pidan ayuda en los espacios comunitarios.

"Es muy compleja la situación, cada día se sigue sumando gente que necesita de la ayuda que brindamos. Los compañeros que llevan adelante los comedores y merenderos hacen un trabajo a pulmón y con la colaboración de ellos mismos porque hacen falta alimentos frescos para incorporar a las ollas", cuenta Lorena Quiroga, referente social.

Lorena Quiroga es referente de Libres del Sur Territorial. Foto: 0223.

La mujer explica a 0223 que, por la alta demanda, los espacios se tuvieron que organizar con listas de espera. "Las personas se van trasladando a distintos comedores, van recorriendo para poder alimentar a sus familias porque no pueden cubrir la necesidad alimentaria en sus hogares", señala.

La inflación y el hambre no discrimina a ningún marplatense y batanense. La constante suba de precios sumerge en la pobreza a más familias. "La realidad es que tenemos todo tipo de personas con problemáticas económicas. Tenemos compañeros que están organizados en organizaciones sociales que perciben un ingreso, personas que hacen changas y también tenemos trabajadores de la economía formal, que sus sueldos han quedado desfasados por la inflación y lamentablemente, más allá de que tengan un trabajo en blanco, necesitan acercarse a alguno de estos espacios", afirma.

La referente del movimiento Barrios de Pie - Libres del Sur Territorial reconoce que "la situación varía por mes" y se acentúa especialmente en época de bajas temperaturas. "Este invierno hemos tenido muchísima demanda, ha fluctuado demasiado la economía y la inflación es cada vez mayor. Los sueldos están quedando desfasados", insiste.

Quiroga asegura que a "cualquier familia le cuesta mucho" acercarse a un comedor o merendero "para cubrir algo tan básico como la necesidad alimentaria" y pone en valor el trabajo de los referentes sociales que, además de revolver la olla para darles de comer, son el canal de escucha de los diferentes reclamos y situaciones que atraviesan las familias.