Susana Abachian: voto, libertad y la esperanza del reencuentro

Susana Berdossian de Abachian es Madre de Plaza de Mayo. Para ella, el retorno de la democracia renovó la esperanza de recuperar a su hijo detenido desaparecido en diciembre del '76.

30 de Octubre de 2023 08:24

La historia de la familia Berdossian Abachian está marcada por el terrorismo: en 1915, escapando del genocidio armenio llegaron a la Argentina en medio del horror que significó la invasión turca para la comunidad. 61 años después, cuando parecía haber quedado atrás el horror de la guerra, el horror volvió a marcarlos. El 27 de diciembre de 1976, Juan Carlos Abachian fue detenido-desaparecido.

Cuando en el mes de febrero se anunció el regreso de la democracia, los Berdossian Abachian renovaron la esperanza de que algún día después del 10 de diciembre de 1983 el deportista regrese a la casa paterna. Esperanza que aún hoy, a sus 92 años Susana Berdossian de Abachian mantiene intacta.

“Siempre les digo que si se enteran de lo peor, yo no quiero saberlo. Quiero seguir con la ilusión”, dice Susana en diálogo con 0223. Para su familia, el 30 de octubre de 1983 fue una jornada especial, no solo por el cumpleaños 18 de Marta, la hija menor del matrimonio que inició las celebraciones yendo a la Escuela Provincial 2 a votar por primera vez, sino porque tenían la ilusión de que, tras la asunción de quien resulte electo presidente se terminen por fin los allanamientos en su vivienda, y un día Juan Carlos toque el timbre de la casa y vuelva a reunirse con su hijita - que tenía 8 meses al momento de la desaparición del basquetbolista- y la familia vuelva a estar completa. 

Susana siempre fue noctámbula -algo que aún hoy la caracteriza- pero aquel domingo, al igual que la mayoría de los argentinos se levantó temprano, preparó su documento, desayunó y junto al grupo familiar se encaminaron a primera hora a la escuela provincial 2 para emitir su voto. “Sí, fui, ¿cómo no íbamos a ir? Fuimos todos con una sensación de alegría y de esperanza que no te puedo explicar”, dice para ella fueron “unas elecciones en las que no importaba el resultado, importaba que recuperábamos la libertad de elegir y se terminaba todo lo que vivimos en esos años tan oscuros. Esta puerta que ves allá tiene 20 balazos que hicieron ellos”, dice Susana. “Ellos” son los militares, palabra que Susana se niega a pronunciar, así como se niega a ver series y novelas turcas en sus ratos de ocio.

Luego de emitir su voto, Susana y su familia volvieron a su casa, almorzaron en familia y mientras aguardaban el escrutinio, ultimaban los detalles de la cena para celebrar el cumpleaños de su hija. Para las seis de la tarde “Mar del Plata era una fiesta". "La gente salió al centro a festejar, nosotros teníamos una reunión acá, pero festejamos también, salimos a la calle acá y bailamos", rememora.

Desde el '83 hasta la fecha, fue siempre a votar con la misma convicción: “Defender la Democracia”. Este domingo, pese a que no se sentía del todo bien "por los achaques", le confirmó a su hija que iba a ir a votar. Entonces, una amiga de su hija menor la pasó a buscar por la mañana, la llevó a la escuela 2 y luego, ella invitó al almuerzo.

“Pienso que se tiene que enseñar lo que pasó en las escuelas, para que los jóvenes tengan conciencia”, dice mientras confiesa que considera que una de las explicaciones del fenómeno Milei es el desconocimiento de los adolescentes que con 16 años votaron por primera vez y eligieron al candidato libertario por desconocimiento de la historia argentina.

“Deseo que la juventud sea sana, que sepan lo que pasó para que no tengamos otra dictadura”, dice, al tiempo que considera que aún está nerviosa y aguarda que llegue el 19 de noviembre para terminar con la incertidumbre y que el país continúe en democracia, "porque la democracia es Libertad", cierra.