Sorpresa en Olavarría: apareció un aguará guazú en la ciudad y mordió a un bombero

Un insólito episodio tuvo lugar en la madrugada de este miércoles en Olavarría: un aguará guazú -una especie en peligro de extinción y que no es autóctona de la llanura pampeana hace cientos de años- apareció merodeando en un barrio popular de esa ciudad. 

Alertados por la presencia del animal -similar a un zorro-, los vecinos de la zona llamaron alrededor de las 4 de la mañana a Defensa Civil para dar aviso de que el ejemplar deambulaba en la vía pública, en Rufino Fal y calle 19.

Una unidad de Bomberos Voluntarios llegó hasta el barrio Pro Casa V para capturar al aguará guazú y ponerlo a resguardo. Mientras se producía la maniobra de rescate, el animal alcanzó a morder a un bombero, que debió recibir atención médica en el Hospital Municipal por la herida.

Luego de ser enjaulado, el animal fue derivado al Bioparque La Máxima, donde recibió atención veterinaria. Unas horas más tarde, la Fundación Temaikén, en el partido de Escobar, fue convocada por su experiencia en el tema y mandó especialistas a Olavarría, para trasladar al espécimen hasta el parque de esa ONG. 

“Nos convocó el miércoles la Dirección de Fauna de la provincia de Buenos Aires porque habían encontrado un animal en la localidad de Olavarría. Los datos que pudimos recabar cuando llegamos al lugar es que se trata de un animal que vio un vecino, éste dio aviso a la Policía y durante la noche estuvieron haciendo el operativo para poder capturarlo” relató Guillermo Delfino, especialista en conservación y encargado del cuerpo de cuidadores de la Fundación Temaikén, al medio Verte. 

Qué pasará con el aguará guazú

Delfino reveló detalles de los primeros estudios a los que fue sometido el ejemplar de aguará guazú: “Hasta el momento, por lo que pudimos ver entre el miércoles a la tardecita y este jueves es un macho joven, que se ve en buen estado de salud”.

“No tiene cuestiones características de un animal que haya estado como mascota, como marcas de collares o collar mismo. Nos ha pasado en otras oportunidades de encontrarlos con algún collar, lo cual denotaba claramente que eran mascotas, en este caso no existen indicios marcados de mascotismo”, adelantó sobre la primera hipótesis que se planteó tras el sorpresivo hallazgo. 

Sobre el comportamiento de este “zorro sagrado” para los pueblos originarios, Delfino afirmó que “aún es muy pronto para decir si fue una mascota, aunque nos da para pensar que ingresa en lo que venimos pensando desde hace tres o cuatro años: que responde a la ampliación del área de distribución de la especie”.

“En los últimos años son varios los casos de ejemplares de aguará guazú que se han visto en la provincia de Buenos Aires, lo cual es inédito y este ejemplar particularmente es el ejemplar que más al sur se ha encontrado. Nunca se han encontrado tan al sur”, reveló.

El especialista resaltó que “es super importante seguir trabajando en la recopilación de datos, sobre todo lo que nos pueda llegar a brindar la comunidad local, tanto de Olavarría como de localidades aledañas para el abordaje de la expansión del rango de ocupación que estamos viendo en la especie”.

“Con este ejemplar en particular en los próximos días, la semana que viene o en diez días cuando esté más adaptado y tranquilo dentro de los corrales que tenemos destinados en el Centro de Recuperación de Temaikén para la especie, es hacer el chequeo sanitario”, anticipó y resaltó que "fue colocado en un recinto donde tendrá el menor contacto posible con los seres humanos hasta conocer su destino definitivo".

Defino aseguró que “si todo esto diera bien y no se tuviese ningún hallazgo negativo, lo ideal sería poder insertarlo en un ambiente natural". "Pero eso ya es más competencia de la autoridad de fauna de la provincia de Buenos Aires, que va a ser la que determinará el destino final del ejemplar", agregó en diálogo con Verte.

Cómo es el aguará guazú

Es un cánido endémico de Sudamérica, que habita en zonas abiertas inundables entre pajonales e isletas de monte y palmares. En Argentina, su distribución tradicional es en las provincias de Corrientes, Formosa, Chaco, norte de Santa Fe y Córdoba y este de Santiago del Estero.

Este animal se caracteriza por sus patas largas y negras, y un pelaje largo de color rojo con una especie de crin oscura en su cabeza. Suele ser confundido con un zorro al ojo inexperto.

Se encuentra amenazado principalmente por la acción humana, a través de la pérdida y/o degradación de sus hábitats óptimos, atropellamientos, persecución directa, captura y caza ilegal, ya que el poco conocimiento sobre la especie la rodea de mitos y desinformación, como, por ejemplo, la creencia de que se alimenta de ganado o es peligroso para las personas, cuando su dieta principal incluye peces, pequeños roedores, aves, reptiles y también frutos. Es huidizo frente a la presencia humana.