Daniel Nuñez: "Yo no le voy a decir a Montenegro qué funcionarios tiene que remover"

El concejal y presidente de la UCR local, Daniel Núñez, destacó la reciente restricción de acercamiento que dictó la Justicia de Mar del Plata contra un dirigente sindical y tres funcionarios que forman parte de la gestión de Guillermo Montenegro pero descartó avanzar con pedidos de renuncia.

“El intendente es quien tiene que analizar la situación que se está dando con el radicalismo, su principal socio político, y tomara las decisiones que considere. Sabemos que es una situación particular”, expresó el dirigente de la coalición oficialista, en diálogo con 0223.

Nuñez habló después de conocer el dictamen de la jueza de Garantías Lucrecia Bustos en donde le prohíbe al subsecretario de Gestión Territorial, Daniel Teruel; los directores coordinadores de Desarrollo Social, Lucas Amodey y Santiago Reyes, y al titular de la CTA Autónoma, Christian Echeverría, acercarse a menos de 200 metros de él así como de sus pares Gustavo Pujato y Marianela Romero y el militante Luciano Pagni.

La medida se origina por la denuncia por amenazas y otros episodios de violencia que presentaron dirigentes de la UCR a fines de marzo, y se conoce poco después de la ampliación de la misma denuncia que hizo esta semana Nuñez, a partir de las “pintadas agraviantes” que se registraron en la casa donde vive su hija.

El titular del radicalismo a nivel local reconoció que la decisión de apartar a los funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Social que están involucrados en la denuncia “depende del Ejecutivo”. “Ninguno de nosotros le va a ir a decir al intendente qué funcionarios tiene que nombrar o cuáles tiene que remover”, remarcó.

La restricción de acercamiento se mantendrá vigente por el término de tres meses y, en el marco de esta medida, Nuñez también aclaró que no tendrá ningún tipo de custodia. “La medida se va a aplicar como se hace habitualmente: si uno advierte que alguna de estas personas rompe la restricción, llama al 911 y muestra la resolución correspondiente”, explicó.

En este marco, el edil valoró el “respaldo importante” que recibió por “los diferentes partidos que componen Juntos”, la Defensoría del Pueblo y otros dirigentes políticos después de los mensajes intimidatorios. “Siempre estuve en contra de los escraches. Los escraches arrancaron con los genocidas. Hay límites y esferas personales que se deben proteger”, sostuvo.

“Nosotros somos personas públicas que cumplimos funciones públicas y hay que resguardar a la familia. Hay que ser muy responsable y saber hasta dónde llevar el debate. También es importante la responsabilidad de los medios a la hora de no seguir alimentando una grieta que, creo, está matando a los argentinos y nos está haciendo muy mal”, reflexionó, y agregó: “La violencia nunca es el camino. Estoy convencido de que hay que promover el diálogo y el consenso”.