Mató de un disparo y lo reconoció: pidieron hasta 18 años de prisión
A Ernesto Martín lo mataron en noviembre de 2022 en el barrio Florentino Ameghino. Miguel Ángel Galván es el único imputado y llegó a juicio bajo arresto domiciliario.
Por Redacción 0223
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15 años por parte de la fiscalía, 18 años por parte del representante del particular damnificado y absolución por legítima defensa o un exceso por parte de la defensa. Esas son las principales opciones que tienen los miembros del Tribunal Oral en lo Criminal N°2 tras el juicio que se le sigue al acusado que reconoció haber matado de un disparo a Ernesto Martín en noviembre de 2022 en el barrio Florentino Ameghino.
El juicio se desarrolló hasta el viernes y los jueces Roberto Falcone, Néstor Conti y Alexis Simaz darán a conocer su veredicto y sentencia la semana próxima. Desde marzo de 2023 Miguel Ángel Galván cumple la prisión preventiva bajo arresto domiciliario y la querella solicitó que ese beneficio sea revocado.
Este viernes el fiscal Leandro Favaro solicitó la imposición de una pena de 15 años de prisión mientras que el abogado penalista Wenceslao Méndez –como representante del particular damnificado- pidió una condena de 18 años. La defensa a cargo de Mauricio Varela solicitó la absolución al entender que se trató de un caso de legítima defensa y, de manera subsidiaria, en caso de una condena, que sea considerado como un exceso en la legítima defensa.
Desde un comienzo de la investigación –en aquel momento a cargo del fiscal Leandro Arévalo- Galván fue el único imputado por el crimen que se registró la tarde del 25 de noviembre de 2022 en la zona de 25 de Mayo y Madariaga. En su única declaración en Tribunales, el imputado de 39 años reconoció ser el autor del disparo mortal, pero aclaró que lo hizo para defenderse de un ataque que había sufrido en su casa.
Galván dijo que cuando regresó en moto a su casa lo siguieron dos autos con varias personas a bordo que más temprano le habían recriminado un supuesto robo que habrían sufrido en una casa ubicada a ciento cincuenta metros del lugar. De acuerdo a su relato, salió al patio delantero del inmueble ubicado al lado del kiosco que atiende su esposa y tomó un arma de fuego que había en el motor de un auto, se la puso en la cintura y se dirigió a hablar con el grupo agresor.
Ante las preguntas de los investigadores, relató que Martín tenía un arma de fuego y que empezaron a hablar más fuerte hasta que le dio un golpe al auto de la víctima. “Dijo que se le escapó un tiro que rompió la luneta y que las otras personas dispararon tres veces y que él respondió una vez, hiriéndolo en el abdomen”, agregaron.
Si bien en su momento la Sala III de la Cámara de Apelación y Garantías confirmó la prisión preventiva dictada por el Juez de Garantías Juan Tapia, estableció que la la misma se cumpla bajo la modalidad de arresto domiciliario con monitoreo electrónico.
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