Quiénes son los cinco policías de civil que abrieron fuego y cómo justificaron la balacera

Tres de los efectivos, todos de civil y de diferentes comisarías, iban en una Ecosport, y los otros dos en un Bora, con sus armas reglamentarias, claves para descifrar quiénes dispararon contra Matías Paredes.  

El Fiat Palio en el que iban los jóvenes y los balazos que recibió.

6 de Febrero de 2025 12:57

Por Redacción 0223

PARA 0223

El fiscal Alejandro Pelegrinelli dio varias confirmaciones sobre lo que ocurrió durante la madrugada de este jueves en el barrio Bosque Grande, donde Matías Paredes, de 26 años, fue asesinado a balazos cuando estaba dentro de un coche con dos amigos y fueron perseguidos por dos vehículos sin identificación.

Mientras la justicia espera los resultados de la autopsia (se confirmó que el joven recibió dos balazos), que serán vitales para descifrar de qué armas salieron los disparos que terminaron con la vida del joven de 26 años, trascendieron detalles de la primera explicación interna que dieron los efectivos sobre la persecución y la balacera contra el Fiat Palio.

Del hecho participaron cinco efectivos, personal GTO, de diferentes dependencias, en dos vehículos sin identificación y vestidos de civil. En un Volskwagen Bora iban el Subteniente Juan Molina y el Sargento Julio Rufino Gerez, ambos de la comisaría 16° y con sus armas reglamentarias, marca Bersa Thunder.

En la Ford Ecosport iban el Oficial Principal Héctor Murray, de la SubComisaría de Parque Camet, el Oficial Principal Bernardo Emilio Flores, de la Comisaría 15°, y el Oficial Principal Javier Yancamil Masia, de la Comisaría 14°, todos también con sus armas reglamentarias.    

En su explicación de los hechos, el primer reporte luego de que un patrullero de la dependencia con jurisdicción en la zona detuviera al coche en el que iban los jóvenes ya con Paredes herido de muerte, se explica que interceptan al Fiat Palio en Fortunato de la Plaza y Polonia, tras la solicitud de los otros agentes, que "venían en seguimiento" del auto teniendo en cuenta que "el profugado que estaríamos buscando bajo la orden de servicio se daría a la fuga en rodado a la ciudad de Miramar".

"En dicha intersección personal observa que el ocupante que iba en la parte trasera del vehículo exhibe un arma de fuego color plateada, para escuchar un fuerte estruendo, ante lo cual repelen la agresión", dice el parte, sumando el detalle clave de la aparición de un arma dentro del Palio, ubicándola en la parte trasera, donde estaba Matías Paredes. De acuerdo a lo dicho por el fiscal este jueves por la mañana, ningún arma fue secuestrada en ese vehículo, y los tres integrantes no tenían antecedentes penales.

Sin todavía certeza de la existencia de una orden de servicio escrita para que personal de los Gabinetes Técnico Operativo de distintas comisarías estuvieran en la zona, una de las hipótesis es que los dos vehículos de los policías estaban a la búsqueda de "El Guachín", prófugo por el crimen del kiosquero Cristian Velázquez.

Más allá de esa suposición, todo el accionar -según la declaración del resto de los ocupantes del Fiat Palio y el registro fílmico- estuvo mal realizado: sin rodados identificados, vestidos de civil y tras intentar abrir la puerta del auto que no había sido denunciado cometiendo delito alguno, dispararon al menos siete veces según los accidentes balísticos hallados.