Árboles y mampostería caídos, calles anegadas y una ciudad fantasma: lo que dejó la tormenta en Mar del Plata

El aviso a corto y mediano plazo del Servicio Meteorológico Nacional y el comportamiento de los vecinos que se refugiaron en sus hogares, con comercios cerrados y eventos suspendidos, sin colectivos ni clases, permitieron que la fuerte tormenta que azotó a Mar del Plata no dejara el saldo imaginado ante la catástrofe de Bahía Blanca.

Hubo calles anegadas (una postal durante cada tormenta) en las primeras horas de la lluvia debido a la intensa caída de agua hacia la tarde y desde Defensa Civil confirmaron a 0223 que no hubo evacuados.

Transitar por muchos sectores el viernes por la tarde, luego del comienzo de la tormenta minutos antes de las 18, era casi imposible, aunque los pocos vehículos que lo hicieron se encontraban con una ciudad fantasma, muy parecida a la pandemia.

"Tuvimos algún coletazo por la cantidad de agua que cayó, como árboles y mampostería caídos pero la noche finalmente fue tranquila", informó el titular del área, Alfredo Rodríguez.

En ese sentido, indicó que el hecho de que no hubiera gente en las calles por el pedido de las autoridades para resguardarse en sus hogares, generó que no se sufrieran mayores inconvenientes como personas heridas o siniestros viales.

"Estuvo bastante bien para lo esperado", reconoció el funcionario desde el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) donde toda la noche se mantuvieron las guardias.

De acuerdo a las estimaciones, "lo peor ya pasó", aunque en muchos barrios de la periferia las consecuencias sobre el estado de las calles serán relevados este sábado.