Desempató el presidente del Concejo y el boleto costará $6,86

Tras varias horas de demora, se aprobó la nueva tarifa que regirá desde este domingo. El arroyismo tuvo doce votos y debió desempatar Guillermo Sáenz Saralegui. Así se estrenó la mayoría automática oficialista.  

Guillermo Sáenz Saralegui desempató con su voto doble de presidente del Concejo Deliberante. Foto: 0223.

14 de Abril de 2016 18:46

Por Redacción 0223

PARA 0223

El boleto de colectivo en Mar del Plata tiene nueva tarifa: $6,86. Tras más de cinco horas de demora, los concejales se sentaron en sus bancas y luego de una acalorada discusión se aprobó el aumento con los votos del oficialismo, que requirió además el desempate del presidente del cuerpo Guillermo Sáenz Saralegui. La nueva tarifa comenzará desde este domingo.

Afuera, la tensión que se vivió en la calle en horas del mediodía por la presencia de militantes de organizaciones sociales que rechazaban la suba, y choferes de la UTA que exigían que se apruebe la nueva tarifa, se fue diluyendo poco a poco y para la hora que los ediles comenzaron a tratar el proyecto muchos ya se habían ido. Minutos antes de las 18.30, se realizó la votación nominal que terminó con los 12 votos del oficialismo (Agrupación Atlántica - PRO y Unión Cívica Radical) a favor del incremento y los 12 de la oposición (Frente Renovador, Frente para la Victoria y Acción Marplatense) en contra.

Ante la igualdad de los votos, se computa como doble el del presidente del Concejo Deliberante, por lo que el intendente Carlos Arroyo estrenó la mayoría automática que ostenta en el cuerpo legislativo desde el 10 de diciembre.  

Después de acaloradas reuniones, en donde peligró el interbloque Cambiemos, pasadas las 15.30 comenzó el debate con el pedido del radical Nicolás Maiorano para alterar el orden del día y tratar primero el expediente que aborda la suba del boleto.  

El primero en tomar la palabra fue el concejal del Frente para la Victoria Marcos Gutiérrez, quien anticipó el voto negativo del bloque porque la suba significa “tocarle otra vez el bolsillo a los marplatenses”. El edil señaló, además, que “hay datos irreales en el estudio de costos”, entre ellos los subsidios que reciben las empresas.

Marcelo Fernández, de Acción Marplatense, también anticipó que la bancada no votaría a favor del incremento de la tarifa del transporte público. Y, al igual que Gutiérrez, el exdirector de Asuntos de la Comunidad también le apuntó al estudio de costos elaborado por el Ejecutivo, en el cual se basa la decisión de llevar la tarifa a $6,86.

Fernández explicó que “además de las debilidades del estudio de costos del cual no tuvimos respuestas, no vamos a convalidar la lógica del aumento trimestral del boleto de colectivo como está pasando actualmente. A cinco meses del último incremento, hoy se otorgó otro y los empresarios presentaron una nota pidiendo un nuevo aumento del 20% sobre el valor de $6,86 cuando ni siquiera se había aprobado”.

Votamos en contra del incremento del boleto, porque sabemos que los bolsillos de los vecinos están sufriendo demasiados ataques, ya que están debiendo afrontar los aumentos de la tarifa de energía eléctrica y de gas y la canasta familiar, entre otros. Por eso, nos manifestamos en contra de un nuevo golpe a la economía de los marplatenses y batanenses”, sostuvo.

Por último, el concejal  de AM recordó que “el aumento del boleto de colectivo, ocurre en el marco de una investigación de la Fiscalía porque aparentemente hay personas que figuraban como empleados de empresas de transporte, cuando no lo eran. Por lo cual, consideramos que el momento requería de tener más certezas sobre esta situación”. 

 

 

Tras las palabras de Fernández, fue el turno de Lucas Fiorini del Frente Renovador, que con argumentos parecidos, también señaló que no estaba dispuesto a votar el aumento de boleto.

En medio de las discusiones, la kirchnerista Marina Santoro le recriminó al presidente del Concejo Deliberante que haya cerrado las puertas del recinto y no le permitiera a los vecinos formar parte de una sesión en la que se trataba un tema tan sensible. Además, se quejó porque el HCD "no debe ser una escribanía de las empresas de transporte". 

El radical Mario Rodríguez planteó la importancia de que se mejoren lo controles al transporte público y que sea esta gestión la que tome el tema seriamente. El edil alfonsinista fue uno de los propulsores de la idea de que sea el jefe comunal el que tenga la potestad de aumentar el precio del boleto de colectivo. 

El último en expresar su rechazo a la suba, antes de la votación, fue el concejal del unibloque Balut Tarifa Arenas. Dijo que “rechazamos el aumento del boleto de colectivo. Sentimos que es una falta de respeto al vecino del municipio de General Pueyrredon que se dé  un nuevo aumento cuando el servicio no tiene ninguna propuesta de mejora. Más cuando el estudio de costos tiene serias falencias, notas que lo intentan respaldar escritas a mano alzada y facturas que indican precios que no coinciden con los valores de plaza”.

“Hay distintos puntos del estudio de costos, poco claros, donde se informan trabajadores  que en realidad no trabajan, y al respecto la Unidad Funcional de Instrucción de Delitos Económicos N°10 pidió copia completa y certificada del expediente que aprobó el oficialismo del bloque Cambiemos”, añadió.

A su vez, remarcó: “A todo esto le tenemos que sumar  que las empresas, ya mucho antes de saber el resultado de esta votación, pidieron un nuevo aumento  que en caso de que el Bloque Cambiemos lo avale, va a representar para los vecinos de General Pueyrredon, desde diciembre a la fecha que se trate, un aumento de más del 70%. No conozco ninguna paritaria que dé al trabajador un aumento de ese tipo”.

“El oficialismo tenía la oportunidad de tratar y desarrollar herramientas para que el usuario pueda garantizarse que se van a cumplir las frecuencias, con la higiene, con las puntos de carga necesarios para no andar penando, para poder viajar en el servicio público de pasajeros. Porque las empresas amenazan con reducir servicios y personal. En cambio el usuario carece de herramientas de presión. Votamos con responsabilidad y compromiso con los vecinos. Reiteramos que somos una oposición constructiva, con buena voluntad y abiertos al diálogo, pero que seguiremos señalando y nos opondremos a  las decisiones que creemos no son positivas para el conjunto de la comunidad”, concluyó el edil opositor.