Advierten que la separación de residuos en Mar del Plata "cada vez funciona peor"

A través de un acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo, en 2012 Mar del Plata accedió al programa de "Ciudades Emergentes y Sostenibles" que brinda asistencia a las localidades de América Latina que busquen mejorar su sostenibilidad ambiental, urbana y fiscal.

En ese marco, se puso en marcha la separación de residuos sólidos urbanos en el partido. Sin embargo, desde el primer día en que una bolsa verde llegó a la Planta o Instalación de Recuperación de Materiales hasta la actualidad, aunque hubo momentos en que se registraron picos positivos "el programa fue en retroceso". 

La conclusión surge de analizar las cifras publicadas recientemente por el Ejecutivo local en un nuevo Balance de Gestión del Ente Municipal de Servicios Urbanos y el análisis del licenciado en Economía, Alejandro Nahuel Leis, quien tituló su tesis de grado en 2015: "Análisis de la gestión integral de los residuos sólidos urbanos e Mar del Plata desde un enfoque económico" y actualmente trabaja en la Secretaría de Vinculación con el Medio de la Facultad de Ciencias Económicas y Socialices de la Universidad Nacional de Mar del Plata.

Según el Emsur, desde enero de 2016 a agosto de 2018, es decir, durante la gestión del intendente Arroyo, se recuperaron 4.111 toneladas de residuos sólidos urbanos, es decir 131,6 tn por mes, o lo que es lo mismo, 4,42 tn por día. 

Esa cifra significa solamente el 0,37% de las 1200 toneladas de residuos domiciliarios e industriales que se producen diariamente en promedio en Mar del Plata. Según el mismo informe del Ejecutivo, cada marplatense genera 0,900 kilos de residuos diarios. 

"Se genera más basura y se separa peor", sostuvo en diálogo con 0223 Leis. Es que cuando el licenciado realizó su tesis, para la cual tuvo en cuenta los datos generados entre 2012 y 2014, se recuperaba más del 1% de los residuos sólidos urbanos. "El pico  más alto había sido del 1,5%", explicó.

¿Cuáles son los motivos del fracaso?

La lista de los problemas que el sistema de separación de residuos enfrenta en Mar del Plata es extensa. "La Municipalidad está en conflicto con la Cooperativa Cura que es la que tiene el usufructo de la Planta desde que el BID envió los fondos para la construcción y puso como condición su espíritu social", comenzó a explicar el licenciado en Economía y especialista en el tema, Alejandro Nahuel Leis.

"Además la gente separa mal y a los trabajadores les llega cualquier cosa", indicó el economista. 

Si bien "para que a Cura le llegaran todos los días bolsas verdes" en un primer momento la ciudad se había dividido en zonas que debían separar la basura diferentes días a la semana, ese sistema a fines de la gestión de Pulti se modificó para llegar a lo que se realiza hoy en día donde sólo los días martes y viernes se debe sacar a la calle cartones, vidrios, papeles y plásticos posibles de reciclarse. Sin embargo, "si un vecino saca una bolsa negra los días que no corresponde, los recolectores de la 9 de Julio la llevan igual, y eso no debería ser así porque a los recuperadores les llega todo mezclado".

"Desde el inicio de esta gestión municipal no hubo ni una política para fomentar la separación", sentenció Leis y señaló: "No invierten ni un peso en promocionar el sistema".

Concientizar a los adultos es una tarea quizás más complicada que hacerlo con los niños y niñas, quienes son "el motor del cambio". "No hay campañas en las escuelas, y esto es un problema de educación que el Estado tiene que encarar, pero no invierte", añadió.

Otro de los problemas que rescató el economista marplatense es la situación en la que se encuentra la planta. "De las dos cintas transportadoras que hay, por lo general sólo funciona una", dijo.

Por otro lado, hay materiales que se pueden vender porque no hay un espacio de acopio bajo techo y lo suficientemente grande para almacenar ni se consiguieron los compradores interesados. Tal es el caso del polietileno y el polipropileno, presente en bolsas de nylon y productos plásticos. 

"La situación es insostenible, los cooperativistas trabajan en espacios insalubres, no sacan más de $12 mil por mes, siendo muy positivos", indicó por otro lado Leis y concluyó: "El sistema es bueno, pero las fallas son tantas que no funciona ".