La historia de la marplatense que se destaca como teniente en la Armada
Se trata de Romina Scalabroni, de 32 años. Hoy se encuentra en la Base Aeronaval Punta Indio, siendo la auditora del destino
Por Redacción 0223
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La marplatense Romina Scalabroni eligió ser abogada y sobre el fin de su carrera universitaria vio la posibilidad de ingresar a la Armada Argentina como profesional, mediante el Curso de Integración Naval (Cuina). Hoy se destaca en la fuerza, cumpliendo funciones en la Base Aeronaval Punta Indio de la Provincia de Buenos Aires..
La joven, nacida en el barrio Chauvín, tiene 32 años y es Teniente de Navío Cuerpo Profesional Auditora, graduada de la carrera Abogacía en la Universidad Nacional de Mar del Plata (Unmdp); es especialista en derecho penal, criminalística y medicina forense.
La vida escolar de Romina transcurrió en el Colegio Divino Rostro y, de joven, sus mejores recuerdos fueron la tabla de surf y el mar; hacía natación en el Club Emder (Ente Municipal de Deportes y Recreación) y hockey, en el Trinity Club Hockey. "Llevaba una vida deportiva muy activa, algo que actualmente sigo teniendo, con las rutinas y exigencias que mi profesión requiere", comentó.
A los 17 años Romina comenzó la carrera de abogacía en la Universidad de Mar del Plata, que finalizó a los 22. "Cuando estaba por recibirme, tenía un compañero que cursaba conmigo --quien era suboficial de la Armada Argentina-- y empezó a inculcarme la idea de ingresar mientras trabajaba en una Fiscalía como pasante", recordó.
Aunque no provenía de familia militar, la teniente Scalabroni supo adquirir desde pequeña de su padre el sentimiento por la vida militar y, de esta manera, llegó a ser la primera integrante de su familia en convertirse en militar: "Mi papá tuvo un apego militar desde siempre, quiso entrar a la Fuerza Aérea y no pudo hacerlo por problemas de vista; y él nos crió siempre en un ámbito disciplinario", destacó.
Luego de pensarlo, sortear los obstáculos de la inscripción, y sobreponerse a los miedos del cambio, dio el paso que marcaría su vida para siempre: caminó las dos cuadras que separaban su facultad de la delegación de incorporaciones de la Armada. Comenzó su preparación física para ingresar al CUINA: "Todos sabíamos que iba a ser muy duro", pero lo sobrellevó porque "en mi familia, estaban muy felices y orgullosos".
El 12 de julio del 2012 egresó del curso como Teniente de Fragata y su primer destino dentro de la Institución fue el Comando de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada (COAA). Hoy se encuentra destinada en la Base Aeronaval Punta Indio en la Provincia de Buenos Aires, que depende de la Fuerza Aeronaval N°1, siendo la auditora del destino: "Desde mi formación hasta ahora vengo incorporando conocimientos aeronavales", dijo.
La Teniente Scalabroni describe a la Armada como una familia y destaca: "Me gusta cómo se apoyan las personas y el grupo de trabajo que uno puede conformar". "Para mí, la Armada Argentina es valores, disciplina y familia", concluyó.
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