Sacaron la heladera y volverán a excavar en la búsqueda de los restos de Fernando Lario

Las excavacaciones en el pozo molinero donde las autoridades judiciales intentan dar con los restos de Fernando Lario, cuyo paradero se desconoce desde el 7 de julio de 2012, demandarán una cuarta jornada de trabajo después de que este miércoles no se hayan obtenido mayores resultados de interés para la causa que intenta esclarecer la desaparición del arquitecto marplatense.

Las fuentes oficiales que consultó 0223 confirmaron que la heladera hallada ya fue retirada por los operarios intervinientes en el transcurso de la tarde. También se extrajeron dos carretillas, un tanque de nafta de auto y "basura en general", según se detalló.

Las autoridades consultadas reconocieron que la localización del electrodoméstico dificultaron "muchísimo el trabajo manual" que lleva adelante el personal de Riesgos Especiales de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, en conjunto con el Ente Municipal de Vialidad y Alumbrado Público (Emvial), Defensa Civil y Obras Sanitarias (Osse).

Los investigadores tenían previsto finalizar este mismo miércoles con la excavación del pozo molinero pero finalmente continuarán este jueves donde esperan llegar a su máxima profundidad. Las fuentes precisaron que la profundidad de la excavación alcanzada, hasta esta instancia, es de 17,5 metros, de los cuals dos metros fueron cavados a manos por los agentes de Riesgos Especiales.

"Lo que resta hacer es un aplanamiento con maquinaria pesada y luego se continuará de forma manual", anticiparon, con respeto al eje que tendrá la labor que se realizará desde las primeras horas de mañana, donde ya habrá novedades definitivas con respecto a la presencia o no de los restos del docente de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP).

En caso se lleguen a detectar restos humanos, la titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº4, Andrea Gómez, adelantó que se hará una extracción de ADN del material hallado y se compararán con los del arquitecto desaparecido para enviarlos a un laboratorio especializado que coteje su origen.

La causa, que permanecía sin mayores avances, se reactivó en las últimas semanas a partir del aporte testimonial que hizo un hombre de 70 años y que aseguró que el cuerpo de Lario había sido arrojado junto a una heladera en un pozo de gran profundidad que está en inmediaciones de Valle Hermoso.

En el transcurso de la pesquisa, Julio Razona, abogado que representa a la familia de Lario, había afirmado en diferentes oportunidades que tenía "suficientes indicios como para presumir" que delincuentes habían asesinado a golpes al arquitecto. A partir de ello, en noviembre de 2017 la causa tuvo un cambio de carátula rotundo: el título de “averiguación de paradero” se modificó por el delito de "homicidio en ocasión de robo".

El letrado cargó numerosos cuestionamientos por la falta de avances de la Justicia a la pesquisa: según él, los autores materiales del crimen ya están identificados. Bajo los fundamentos de esas críticas, es que pidió en septiembre del año pasado la recusación de Fernando Castro, quien finalmente se desligó de la investigación. Fue el tercer cambio en el histórico caso: la primera persona que se había quedado al frente del expediente fue la fiscal María Isabel Sánchez.