Transportistas escolares piden rever el horario de ingreso de los estudiantes

La vuelta a clases presenciales parecía ser un alivio para los propietarios de vehículos de transporte escolar que, durante todo el 2020 no pudieron desarrollar su actividad. Pero, la implementación de burbujas para los alumnos con horarios de ingreso y egreso de los estudiantes  de manera escalonada a los establecimientos educativos generó una complicación que no tenían contemplada. Es por eso que solicitaron una audiencia en el Consejo Escolar.

En diálogo con 0223 Radio, Cristina Rubio, referente de los propietarios de Transportes escolares, aseguró que la situación se tornó “muy dificil”. “Se nos está haciendo muy difícil  coordinar los horarios de ingreso de los chicos”, graficó tras explicar que en algunos casos, hay estudiantes que pasan una hora arriba del colectivo mientras esperan que llegue el horario de ingreso a las aulas. 

Según explicó Rubio, el problema se repite con los horarios de egreso de las aulas ya que los alumnos tienen una franja horaria de 10 minutos entre burbujas “y tenemos que volar para llegar a todos los colegios”, dijo.

Es por eso que solicitaron una Audiencia en el Consejo Escolar con el objetivo de reiterar el pedido de ingreso y egreso en un único horario para los alumnos que utilizan el servicio de transporte privado. “Esto nos simplificaría el trabajo a nosotros y agilizaría el tránsito en las escuelas”, consideró la mujer.

Además, Rubio consideró “inhumana” la situación a la que se ven obligados a tener a los alumnos dentro de los vehículos. “Muchas veces vienen en grupo con los hermanos que entran en un horario anterior y se quedan esperando arriba del colectivo. No es humano para un  niño pasar una hora encerrado”, dijo.

Por último, la mujer señaló que debido al miedo que aún tienen muchos padres, la crisis económica y el escalonamiento horario, la cantidad de usuarios del servicio disminuyó notablemente. “En marzo del año pasado tenía 130 chicos, este año tengo 9”, ejemplificó tras detallar que los responsables de los menores eligen para este ciclo lectivo abonar el servicio de manera quincenal para evitar así pagar un servicio que puede ser suspendido, como ocurrió durante 2020.