Subsidios: el tema que atraviesa la agenda de Montenegro

El intendente pide desde el año pasado una revisión del sistema. El gobierno nacional empieza a dar respuesta, pero en medio de una disputa con Rodríguez Larreta, que Montenegro quiere evitar. El tema ata otras cuestiones. 

Montenegro habló cara a cara con el ministro de Transporte por los subsidios.

23 de Febrero de 2022 20:25

Guillermo Montenegro se encarga de recordar en charlas informales que comenzó a quejarse por el reparto desigual de subsidios al transporte entre el Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba) y el interior del país el año pasado. Hoy, el tema se convirtió en un nuevo foco de conflicto entre el gobierno nacional y el de la Ciudad de Buenos Aires y golpea a muchos distritos del interior.

El reclamo de Montenegro se aceleró en las últimas semanas cuando el tema se nacionalizó. El jefe comunal tiene aliados en esta pelea, que no necesariamente son de su mismo color político. Es más, la decisión del gobierno nacional de confrontar directamente con Horacio Rodríguez Larreta por este tema lo puso en una situación incómoda. Por eso, cada vez que puede, aclara que la inequidad no sólo es con Caba, sino con toda el área metropolitana, que incluye al conurbano bonaerense.

La semana pasada, el secretario de Gobierno, Santiago Bonifatti, encabezó una conferencia para dar detalles de esas inequidades que denuncia el gobierno local. La conferencia buscó desacreditar el anuncio que horas antes había realizado el gobierno nacional sobre un incremento del 40% en los subsidios para el interior del país: hace falta una suba del 500% para equiparar los subsidios, planteó.

“Esta discriminación es tan flagrante que se puede describir con mucha facilidad. Un pasajero de transporte público del Amba paga un 20% de lo que cuesta ese viaje y el 80% son subsidios; mientras que un pasajero de Mar del Plata o el interior del país paga el 73,5%, por ende, solo el 26,5% son subsidios entre los que aporta no solo Nación, sino también Provincia”, remarcó el secretario de Gobierno.

Esta semana arrancó con otro movimiento dentro del tablero del transporte: los empresarios marplatenses solicitaron un reajuste tarifario para llevar el boleto de $59,90 a $91,96. Argumentaron el proceso inflacionario y obviamente la carencia de subsidios.  El Concejo Deliberante, el año pasado, le cedió la facultad a Montenegro de definir la tarifa del boleto, en una sesión que estuvo marcada por la discusión de los subsidios.

“Lo que el gobierno no puede explicar es que todavía haya lugares en los que el boleto valga 18 mangos”, dice un hombre de confianza del intendente, que asegura que el debate se aceleró porque forma parte de los ajustes que el FMI le reclamó al gobierno nacional. “Y este es el que le pega más especialmente a los municipios”, marca.

Eso fue, en parte, lo que charlaron los intendentes de Juntos cuando semanas atrás se reunieron en Mar del Plata. Sin hablar explícitamente de este tema, condicionaron su apoyo a que los municipios no sufran la consecuencia del ajuste. “Esta es una consecuencia”, insisten desde Mar del Plata. En esa reunión, cuentan cerca de Montenegro, el jefe comunal les planteó a sus pares del conurbano que insistiría en su reclamo, aunque sus municipios salgan perjudicados. Pero una cosa es encabezar la lucha del interior contra el Amba y otra del interior contra Larreta.

En ese contexto, desde el municipio valoraron la reunión que este miércoles tuvo el intendente con el ministro de Transporte de la Provincia, Jorge D’Onofrio. “Fue una charla muy franca y sin vueltas”, afirman. Confían en que esta vez el tema se aborde seriamente para que la tarifa del boleto sea más pareja en el interior y el Amba.

Sin embargo, desde el gobierno provincial hacen hincapié en que la situación del conurbano y de la Ciudad de Buenos Aires tiene diferencias sustanciales. “No es todo lo mismo”, advierten. De los subsidios que se destinan a las líneas del conurbano bonaerense, el 91% lo pone la provincia y el 9% la Nación. En Caba, en cambio, el 43% lo pone el gobierno de Larreta y el 57% el de Alberto Fernández.

“Si Cambiemos no sabe cómo hacer para no subir las tarifas de los boletos sin tener subsidios, que me avisen, que les explico”, había desafiado D’Onofrio al ministro porteño con base bonaerense, Jorge Macri.

Esta discusión, que comienza a darse a lo largo y ancho del país, también tiene una implicancia concreta en Mar del Plata: frena el envío del nuevo pliego de transporte urbano de pasajeros, un tema central en la agenda de Montenegro.

“Hasta que no sepamos cómo va a quedar el tema de los subsidios no lo vamos a enviar porque cambia las ecuaciones”, aseguran desde el Ejecutivo local. El propio Bonifatti ya anticipó que el proyecto no cambiará demasiado del que enviaron el año pasado y fue archivado por el Concejo. Aquel revés en la gestión del intendente marcó, también, la salida de Alejandro Carrancio del oficialismo, tras expresar su rechazo al expediente.

No es el único tema vinculado al transporte que está en la agenda oficial: el problema de los taxis, con menos exposición por el fin de la temporada, sigue vigente. El conflicto surgió por la falta de taxis especialmente durante la noche, algo que se imaginaba como un problema sustancial para Mar del Plata en plena temporada.

El Ejecutivo intervino y ordenó a los taxistas (que forman parte de un servicio público) que garanticen que haya unidades por la noche. Un sector expresó su rechazo a la obligatoriedad y en medio del debate se reinició la histórica pelea por los GPS: algunos choferes piden que no sea obligatorio colocar el sistema y sumar un costo mensual. El Ejecutivo, en cambio, lo defiende como una herramienta central para combatir los delitos en el sector.

Y en esta cascada de temas, abrió otra ventana de discusión: ¿qué pasa con los servicios como Uber o Cabify? Por ahora, el intendente sostiene su postura de no permitir el ingreso de estas plataformas, pero el tema tendrá nuevos capítulos.