Decepción en Tandil por un natatorio fuera de servicio que fue inaugurado en octubre

Lo que en octubre pasado fue una jornada de alegría y buenos augurios, seis meses después atraviesa serios sinsabores. El complejo natatorio de piscinas climatizadas del Centro de Educación Física Nº42 de Tandil, que el municipio construyó para ampliar el desarrollo de la infraestructura deportiva en el distrito serrano, se encuentra sin funcionar.

El flamante espacio se edificó en diferentes etapas y se financió con recursos del fondo educativo. Cuenta con una pileta semi-olímpica con medidas reglamentarias y carriles para competiciones y un doble sistema que utiliza la calefacción tradicional con caldera y bombas y el de losa radiante. La otra pileta mide 6 x 10 metros, tiene una profundidad de 1,20 metros, rampa de acceso y se iba a utilizar principalmente para la rehabilitación de las personas.

Según da cuenta el sitio El Eco, desde la unidad ejecutora del Fondo Educativo se presentó un informe técnico en donde se asegura que en torno a la sede deportiva “no se respetaron las condiciones mínimas de uso y mantenimiento del edificio y las recomendaciones realizadas por la empresa y la inspección de obra”.

El informe firmado por el técnico Roberto Garijo, quien estuvo a cargo de los trabajos, indica que al momento de la inauguración, “se aceleraron los tiempos de calentamiento del agua con el sistema de piso radiante, lo cual no debería haberse hecho, ya que eso generó un recalentamiento en el piso de la pileta y provocó formación de sarro en su superficie”.

Durante la pandemia el lugar fue utilizado para acopiar los módulos alimentarios que se entregan a la sociedad y no volvió a estar en condiciones. Autoridades y parte de la comunidad educativa del CEF sostienen que las fallas que evidencia el complejo natatorio se deben a la falta de controles del Consejo Escolar durante la ejecución de la obra.

La obra del natatorio dejó otros problemas para el sector público de Tandil. Semanas después de la inauguración de las piscinas, el entonces primer candidato a concejal del Frente de Todos, Darío Méndez, elevó un pedido de informes al Ejecutivo tandilense para que explique el destino de más de dos millones de pesos “desaparecidos” en el transcurso de la construcción.

En su solicitud al gobierno del intendente Lunghi, el edil Méndez pidió que se brinden públicamente detalles sobre la rescisión de un contrato con la empresa Zya S.A. en el marco de lo que fue la obra.

Con una nota dirigida al Jefe de Gabinete Oscar Teruggi, respaldado en la ordenanza 15.931 de “acceso a la información pública”, el dirigente justicialista y referente de la Anses en Tandil, también pidió conocer qué sanciones hubo contra la citada compañía en el marco del incumplimiento del contrato y pidió además conocer las actuaciones por parte de la Secretaria Legal y Técnica municipal.