La banda que estafó a José Luis Espert operaba desde la cárcel de Batán

Fue desbaratada en las últimas horas. Los cabecillas operaban desde la cárcel de Batán. En noviembre de 2021 estafaron al diputado con 900 mil pesos.

José Luis Espert fue víctima de una estafa virtual por 900 mil pesos.

24 de Mayo de 2022 10:18

Por Redacción 0223

PARA 0223

El avance de una investigación a cargo de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires luego de que estafaran virtualmente al diputado nacional José Luis Espert por 900 mil pesos permitió desbaratar una banda que realizaba ese tipo de maniobras y cuyos cabecillas operaban desde la Unidad Penal 15 de Batán.

Los procedimientos estuvieron a cargo de la División Delitos Informáticos Complejos de la fuerza porteña y se realizaron varios allanamientos en Mar del Plata, donde se detuvo a dos cómplices. “También se efectuaron procedimientos en la unidad penitenciaria donde están alojados los jefes de la banda”, señalaron fuentes oficiales.

Tras los pedidos realizados por la Fiscalía en lo Criminal y Correccional número 21 y el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional número 44, se avaló la realización de un par de allanamientos en una vivienda en Ecuador Norte al 500 y en Gascón al 8100 donde detuvieron a dos hombres de 40 y 46 años. Ambos están acusados de tener a su cargo la logística, los llamados y la recolección del dinero.

Parte de los elementos secuestrados en la investigación por estafas virtuales.

 

En la primera vivienda secuestraron un disco rígido, cuatro teléfonos celulares, un cuaderno con anotaciones, dos tarjetas SIM, cinco troqueles de tarjetas SIM, una memoria extraíble con adaptador, dos DNI y dos tarjetas de débito. En el segundo inmueble hallaron cinco celulares y una computadora.

De manera simultánea se allanaron varias celdas en el complejo penitenciario de Batán en la que tres reclusos, uno hijo de uno de los detenidos, eran los responsables de elegir a las víctimas y dirigir las maniobras. También hay otras personas investigadas por mover dinero de forma virtual y comprar chips de teléfonos celulares.

 

La maniobra

La investigación se inició con la denuncia realizada ante la Policía de la Ciudad de una estafa por medio de un llamado telefónico donde se le indicaba a la víctima que tendría que transferir el dinero de su cuenta a otra de un distinto banco porque podría encontrarse siendo vulnerada, tras unas compras realizadas en una plataforma virtual.

De esta manera, el damnificado accedió a mover $900.000 hacia la cuenta indicada por el estafador y luego se comunicó con su asesor de cuentas para consultarle sobre la identidad del hombre que lo había llamado, para confirmar si era efectivamente empleado de la entidad.

Al recibir los datos sobre la persona, el representante bancario confirmó que no había ningún empleado con ese nombre, por lo que se confirmó la estafa.