Punto final para una temporada extraordinaria de Peñarol, que no pudo con Boca

Peñarol no pudo lograr la hazaña de revertir la serie de cuartos de final de la Liga Nacional de Básquetbol, y fue derrotado 86-77 por Boca Juniors, como visitante. El "Xeneize" jugará una de las semifinales ante Quimsa de Santiago del Estero. Y el "Milrayitas" se despide de pie en una campaña inolvidable, que lo devolvió a los primeros planos, accediendo a play offs por primera vez desde 2018.

Después de perder los dos juegos en el Polideportivo Islas Malvinas, el equipo de Leandro Ramella había recuperado las esperanzas el jueves tras ganar en La Boca y descontar. Pero los dirigidos por Gonzalo García, con la vuelta del dominicano Eloy Vargas tras solucionar su visa de trabajo, y con un Leonel Schattmann implacable (goleador con 30 puntos), fue superior de principio a fin aunque recién aseguró el triunfo en los últimos tres minutos. 

Es que Peñarol, pese a un primer tiempo que terminó pagando caro en los dos aros -sin la solvencia defensiva que se le conoce y errático en ataque-, nunca se dio por vencido. Esa etapa inicial dejó como saldo a Tomás Monacchi, tal vez su mejor defensor, con rápidas 3 faltas. Schattmann estuvo encendido: 14 puntos en el primer cuarto, otros ocho en el segundo, con 6/8 en tiros de campo. 

El "Xeneize" mantuvo una diferencia en el marcador que osciló entre los 8 y 12 puntos. La máxima en la primera etapa había sido de 16. Siempre que dio la sensación que Boca lo quebraba, los marplatenses reaccionaron. Bruno Sansimoni, ante su exequipo, fue la inhabitual carta de gol "Milrayitas" (21 puntos, con 5/7 en triples). 

Defensivamente, Peñarol jugó al límite y en el amanecer del tercer cuarto otra pieza clave como Phillip Lockett llegó a las tres infracciones. Como contrapartida, Boca Juniors acudió insistentemente a la pintura, donde el lungo Eloy Vargas (16 puntos, 10 rebotes) fue el factor decisivo. También JJ Avila. 

Peñarol ingresó al último parcial con vida, abajo 65-58. Y el pináculo de su ilusión llegó a falta de 6m40s para el final, cuando de la mano de un notable Sansimoni (asistencia y luego un triplazo) y con el esfuerzo de Al Thornton se puso a dos, 70-68. Sin embargo, en la reanudación el base olavarriense cometió su cuarta infracción, y Lockett también quedó al límite y luego se tuvo que ir. Allí los árbitros generaron dudas con sus pitazos. No sancionaron falta de Buendía sobre Marín, y Adrián Boccia de contra le devolvió la tranquilidad a Boca (74-68). De todos modos, el equipo de Gonzalo García, con mayor talla en la pintura, imponiéndose en el rebote ante un disminuído Peñarol, se encaminó al triunfo.

Hubo tiempo para una tímida reacción peñarolense con un triplazo de Valinotti que, tras recibir falta, se convirtió en 4 puntos (76-72). Pero ya era todo demasiado forzado. Y Boca Juniors, con Ávila desde la línea, cerró la historia a su favor. 

Peñarol se fue de pie. Ovacionado por su gente en "La Bombonerita" y desde la virtualidad de internet con los que quedaron en Mar del Plata. Finalizó una temporada donde llegó a estar segundo en la tabla, y volvió a los play offs por primera vez en cuatro años. Con un presupuesto acotado, materia prima propia y buenas elecciones, y un entrenador capaz para conducir y exprimir al máximo el potencial. 

A realizar balances, que serán positivos, y pensar en la próxima temporada. Peñarol le volvió a tomar el "gustito" al protagonismo, e intentará redoblar la apuesta, ya sin Domingo Robles pero con dirigentes que continuarán su legado. 

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