El día que Coppola saqueó los jarrones de un hotel de Mar del Plata para conquistar a una modelo

Según el relato del propio representante de futbolistas, en Mar del Plata comenzó su "conquista más extravagante" que incluyó flores robadas y lluvia de pétalos de rosas y fue retomada en Coppola, el representante.

Guillermo Coppola conoció a Monique Modlmayer en un hotel cinco estrellas de Mar del Plata.

21 de Marzo de 2024 10:01

Fútbol, jet set, desfiles, Versace, glamour, jarrones.... Coppola. "Guillote" sabe reinventarse y vuelve a estar en el centro de la escena mediática tras el lanzamiento de su bioserie "Coppola, el representante" (Star), protagonizada por Juan Minujín. En el capítulo 4 se refleja una de las situaciones más extravagantes en el anecdotario del representante del 10, que si bien en la serie se sitúa en Punta del Este, Coppola detalló que, en realidad ocurrió en un hotel cinco estrellas de Mar del Plata.

"Fuimos con unos amigos a un desfile que Roberto Giordano hacía en el Hotel Hermitage en Mar del Plata", comienza relatando Coppola a Guillermo Poggi en una entrevista para "Coppola Anecdotario" (Radio La 100).

Durante el desfile, que se realizaba en el salón dorado, Coppola fue flechado cuando la alemana Monique Modlmayer apareció en la pasarela. “Se me armó como un círculo, como una luz y sólo la veía a ella”, dijo al tiempo que detalló que tras consultar quién era, sus amigos le aseguraron que "no tenía posibilidad". "Es alemana, así que hablando no iba a entrar. Está casada con un comisario de abordo y tiene mucha guita", recordó entre risas, pero la anécdota no quedó ahí.

Decidido a llamar la atención de la modelo, Coppola fue al lobby del Hermitage y "saqueó" todos los jarrones que oficiaban de floreros para armar un ramo de flores con el que pueda sorprender a la mujer. Llegó con las flores a las que minutos antes había secado con un paño, a la punta de la pasarela y ella lo rechazó. "No acepto regalos de personas que no conozco", le dijo.

Rápido de reflejos, y para no quedar expuesto ante las cámaras, el por entonces representante de Maradona le dio las flores a Karina Rabolini, que compartía pasarela con la alemana. "Recorro los jarrones, saco las flores y me lanzo hacia ella y le doy las flores y ella me dice no acepto regalos de extraños... quede totalmente expuesto. Le di las flores a Karina Rabollini", contó.

Fue el único contacto que tuvo Coppola con Modlmayer en Mar de Plata. Pero "Guillote" no aceptaba un no de la mujer que para él, en ese momento, era la más linda del planeta. Cuando coincidieron en Buenos Aires, Coppola se enteró que el padre de a modelo iba a dar una fiesta, entonces fue al mercado de flores, compró un canasto de rosas y alquiló un helicóptero. "No se cuantas rosas compré. Fui con un canasto y las tiraba desde el aire hacia la fiesta en la que estaba ella...Me enamoraba yo de lo que estaba viendo", contó. En la serie, el helicóptero es piloteado por Carlos Menem Jr. Coppola no lo confirmó.

El segundo intento por conquistarla tampoco funcionó. "Le dicen que era yo el de las rosas, vino me abrazó y me dijo gracias nunca voy a olvidar este espectáculo que organizó para mi padre y sus invitados. Con el tiempo Karina me cuenta que se había separado y viajamos a Punta del Este", explicó.

"Organizamos un viaje a Punta del Este. Habitaciones separadas. Cenamos, le tomé la mano algunas veces, llegaba la hora del postre… Fui a su habitación. Me acerco, cierro la puerta, la abrazo… Pum, pum, pum. Tres segundos de partido y se terminó… Tres segundos de partido y final del encuentro”. En la vida real y en la serie, Coppola escucha: “¿Para esto he venido?”.

La relación, pese a aquel encuentro, siguió al punto que Monique le regaló un jarrón de terracota para su cumpleaños un jarrón sin imaginar que años más tarde ese obsequio tendría una fama insospechada cuando en un allanamiento en 1996 aparecieron 406 gramos de cocaína de baja pureza dentro del objeto decorativo que le valieron al representante de Diego Armando Maradona casi tres meses preso. “No todas se ganan. Algunas se pierden”, cierra Coppola.