"Cuando siento que gatilla, le pedí por favor que no tirara": el dirigente del Soip baleado cree que la "sacó barata"

La justicia investiga el ataque a balazos en la sede gremial, que quedó grabado: "Del puerto no son. A esos dos locos les pagaron", dijo la víctima.

"Cuando siento que gatilla, le pedí por favor que no tirara": el dirigente del Soip baleado cree que la "sacó barata".

9 de Abril de 2025 14:10

Por Redacción 0223

PARA 0223

Mientras la justicia investiga el feroz ataque a uno de los líderes del Sindicato Obrero de la Industria del Pescado (Soip), que se dio en la tarde del lunes y quedó filmado por las cámaras de seguridad, Adolfo Echeverría, el hombre baleado cuando estaba en el piso contó cómo vivió la desesperante situación, y aseguró que está convencido de que no fueron trabajadores del Puerto los que lo balearon dentro de la oficina del gremio.

El video del ataque muestra cómo un hombre armado, que ingresa junto a una mujer -ambos encapuchados- vistiendo el típico delantal blanco y las botas de trabajo que usan en las pesqueras los fileteros, amenaza a Echeverría en las oficinas de la sede gremial, ubicada en 12 de Octubre 4425, y le dispara cuando está en el piso. 

“Traten bien a la gente y hagan las cosas que tienen que hacer. Se ponen las pilas. ¡Se entiende! Vos, me escuchaste lo que estoy diciendo. Traten bien a la gente”, se lo escucha decir antes de disparar. Una secuencia extraña y una frase que la víctima, quien hoy prestó declaración ante la fiscal Constanza Mandagarán, asegura que fue preparada y que el ataque no corresponde a su tarea gremial. 

Por ahora la causa no está nada clara y será vital recolectar las imágenes de las cámaras de seguridad del exterior de la sede para ver cómo llegan y se van los dos atacantes, y el vehículo que utilizaron. 

"Del puerto no son. A esos dos locos les pagaron y fueron ahí, si fueran del puerto van con un mensaje claro, la saqué recontra barata", dijo la víctima el martes por la noche al programa radial "Desde el muelle". "Siento impotencia, quiero averiguar de dónde viene la mano y por qué, sé que de parte de los trabajadores no es, yo ando por todos lados, no creo que venga de parte de ellos", aseguró.

El gremialista recordó que "estaba charlando con uno de los delegados y un trabajador, comentando un reclamo que tenía. Estos dos que entraron estaban impecables, la mina tenía borcegos nuevos. ni olor a pescado tenían. Un rato medio que la dudaron hasta que se mandaron y no sé si me vinieron a buscar directamente a mí que justo tenia una remera del Soip. Lo que sí estoy seguro es que no son trabajadores de la pesca ni vienen de parte de los trabajadores de la pesca". 

Sus sospechan se bsan en su tarea diaria y en la manera en la que su maneja el gremio con los trabajadores, aún con aquellos que puedan estar reclamando una cuestión salarial o un arreglo con las empresas. "Si conocés el día a día del puerto, uno puede tener una discusión con un trabajador, porque hay despidos todos los días, a veces en las negociaciones pueden salir beneficiados o no. Y a veces se tienen que arreglar de igual manera. Y más ahora porque cambiaron las leyes y se nos hace mas difícil el reclamo. Entonces, sí, puede haber trabajadores que hacen un acuerdo y se van contentos y otros no tanto. Pero jamás un trabajador va a venir con un arma y me va a pegar un tiro porque no se siente representado", dice Echeverría. 

"A estos locos les pagó alguien, que es lo que estamos averiguando, y vinieron a decir las boludeces esas que dijeron. Me acuerdo que me pegó un cachetazo y yo pensé, cuando me agaché, que me iban a cagar a palos, a daru n culatazo. La mina me dio unas patadas así nomas. Cuando siento que gatilla, porque él estaba mas cagado que yo, primero le digo "no tirés por favor", en ese momento no la había montado al arma, después la montó y me sacudió. Cuando dispara, la bala me pegó en la pierna y casi me quiebra el fémur por completo. Ahora tengo que estar en reposo para que se me suelde. Sino me iban a tener que poner clavos", cuenta sobre las heridas por las que fue llevado a una clínica, donde le tomaron una primera declaración, antes de estar frente a la fiscal Mandagarán este miércoles.

"Cuando me dice "vos sabes de lo que te hablo". ¡Yo qué le iba a decir, le dije si! Lo primero que pensé es que nos venían a robar. No es la primera vez que nos roban. Nosotros tenemos el gremio abierto, es un gremio de todos, nunca pasó algo así, estoy del 2011 y no pasó nunca, estos no son trabajadores. Por ahi no se encuentra la solución que ellos quieren, un monton de veces vienen cuando no están conformes y te lo plantean ahí, cara a cara. Pero a estos locos les pagó alguien y eso es lo que estamos averiguando", dijo el hombre baleado y agradeció a todos los que le escribieron tras el ataque a balazos del que fue víctima.