El espaldarazo de la Justicia a Cano cuando las críticas arreciaban

Las denuncias del secretario de Hacienda contra la gestión Pulti parecían una obsesión. Sin embargo, la justicia imputó al exintendente la semana pasada. La decisión llegó en el momento en que las críticas contra Cano sonaban cada vez más fuerte.

Tras un sinfín de denuncias Cano logró que Pulti fuera imputado. Foto: 0223. 

10 de Febrero de 2016 20:29

José Cano fue el primer secretario de Hacienda de la democracia y tomó un Municipio con déficit, con problemas financieros importantes, y terminó su gestión con un Municipio con las cuentas equilibradas, con una  solidez que hoy sería envidiable”. La frase de Gustavo Pulti no está sacada de contexto. Eso pensaba en 2007 sobre el actual secretario de Hacienda, cuando lo devolvió a la política al ofrecerle que maneje su equipo económico, poco antes de ganar las elecciones de aquel año. Hoy, en público y en privado, Pulti reconoce que fue su peor error.

En los últimos años José Cano tenía un solo objetivo: demostrar que Pulti destrozó el municipio en materia financiera. Repitió el término “malversación” en cada sesión, cada reunión de comisión y cada comunicado de prensa.  En su etapa como concejal opositor era una misión acorde a su rol de controlar las acciones del Ejecutivo. Sin embargo, esa “misión” continuó en estos dos meses de gestión a cargo de Carlos Fernando Arroyo y a vista de muchos se transformó en una obsesión.

La semana pasada esa obsesión que comenzaba a despertar críticas tuvo sus frutos: la Justicia marplatense imputó a Pulti los delitos de malversación de fondos públicos e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Las pruebas que el propio Cano acercó a la fiscalía de Delitos Económicos (informe del Tribunal de Cuentas y auditorías municipales) fueron claves para que la justicia considere posible la comisión de estos delitos.

Cano ganó una batalla fundamental. Jurídicamente la decisión de la Justicia no tiene una implicancia mayor. Todavía restan varias etapas procesales en las que la causa puede quedar en la nada. Sin embargo, la imputación tiene una carga simbólica muy fuerte y le permite a Cano salir fortalecido, en un momento en que las críticas en su contra comenzaban a arreciar.

Uno de los hombres de mayor confianza de Arroyo a lo largo de la campaña electoral confesó que el plan del actual secretario de Hacienda era asumir, ordenar las cuentas y jubilarse. Estaba implícita en esa búsqueda de orden la recolección de pruebas contra la gestión Pulti. Es probable, incluso, que haya sido su principal motivación para aceptar la oferta. “En seis meses se va”, deslizaban en el arroyismo.

Son varios los que sostienen que esa teoría se cumplirá más temprano que tarde. Nunca hubo confirmación oficial, ni la habrá. Si esto ocurre, el funcionario acordará su salida en silencio y nos enteraremos cuando sea una decisión consumada.

Mientras tanto, su figura comenzó a recibir severas críticas en las últimas semanas. En la reunión en la que se trató la emergencia en la Comisión de Hacienda, los representantes del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) exigían a los gritos la renuncia de Cano. Cuentan que días atrás, cuando el Sindicato de Camioneros decretó un paro de la recolección de residuos, la salida del secretario de Hacienda también fue uno de los planteos que recibieron los negociadores del Ejecutivo.

Cano resistió, no sin sobresaltos. Durante la campaña, Arroyo se cansó de repetir una y otra vez que el único integrante que tenía el puesto asegurado en su futuro gabinete era Cano. En estos años en que el secretario de Hacienda se sumó a la Agrupación Atlántica construyeron una relación de respeto y confianza. Sin embargo, en estos dos meses de gestión, cuentan en su entorno, cada vez discuten más.

La imputación del exintendente es un triunfo para Cano. Puede exhibir que haberse abocado a esa tarea casi con exclusividad tenía una razón que hoy avala la justicia. Sin embargo, no debe olvidarse que muchos marplatenses acompañaron este proyecto por las promesas de una gestión que les otorgue una mejor calidad de vida. Y eso demandará tanta o más dedicación.