Cianobacterias en laguna Brava: aconsejan evitar la pesca y el consumo de pejerreyes

La problemática es similar a la que se registra en varios sistemas fluviales de la Argentina. En el espejo de agua balcarceño ya había generado en 2018 una gran mortandad de peces.

La laguna y su entorno, paisajes magníficos de Balcarce.

2 de Diciembre de 2019 18:54

Por Redacción 0223

PARA 0223

La Dirección de Gestión Ambiental de la municipalidad de Balcarce informó que la laguna “Brava” se halla incluida en una problemática que afecta a diversos sistemas fluviales de la Argentina, que desde hace algunos años registran una serie de floraciones de cianobacterias consideradas toxígenas.

Lugares como los ríos Uruguay, Paraná y Limay, y los embalses de Salto Grande, Río Tercero, Yaciretá, Dique San Roque y Dique Los Molinos son sitios afectados como la “Brava” por floraciones que en algunos casos han generado mortalidad masiva de peces, principalmente en época de verano.

En el caso de la laguna situada en el distrito de Balcarce también se han manifestado importantes registros de mortandad de peces, particularmente en enero de 2018, hecho que preocupó a los pescadores, vecinos y al municipio, motivando el inicio de un seguimiento con estudios más precisos en varios aspectos.

Incluso, en junio de este 2019 la Dirección de Actividades Pesqueras, Acuicultura y Control Pesquero de la provincia de Buenos Aires dictaminó la suspensión de las actividades de pesca hasta el 1 de diciembre del presente año en todas las modalidades.

En la actualidad, los estudios continúan realizándose a cargo del Laboratorio de Ecotoxicología del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras, Conicet, Unmdp; Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Biotecnología, Unlp, Fundación para Investigaciones Biológicas Aplicadas; Laboratorio Fares Taie Instituto de Análisis, Gestión Ambiental de la Municipalidad de Balcarce y Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional de Mar del Plata.

Si bien no se cuenta aún con un sistema de información de su impacto en la salud de las poblaciones expuestas, se sabe que toda floración de cianobacterias debe ser considerada en principio como potencialmente tóxica y, por lo tanto, como un problema de salud pública que requiere acciones para minimizar su efecto negativo en las comunidades en riesgo.

Las cianobacterias han proliferado en los ambientes acuáticos en coincidencia con el alto grado de eutrofización antropogénica y el cambiante ambiente acuático, modificado por el cambio climático global. Tanto las cianobacterias como las cianotoxinas pueden generar efectos adversos en la salud del hombre y los animales.

Este grave problema sanitario presenta sintomatologías similares a otras afecciones, por lo que es posible que no sea correctamente diagnosticado.

Teniendo en cuenta los antecedentes descriptos, y la presencia actual de cianobacterias en la laguna, se recomienda a la población, turistas y aficionados a la pesca no entrar en contacto con ellas.

También sería aconsejable no consumir peces (en especial aquellos que se alimentan de plancton e incorporan a las cianobacterias, como el pejerrey).

En este momento, se encuentra en la laguna una floración de cianobacterias con predominio de la especie Planktothrix agardhii, productora de cianotoxina. La concentración (cs/ml) supera los niveles guía para aguas recreacionales propuestos por la Organización Mundial de la Salud basados en indicadores de biomasa de cianobacterias (Chorus & Bartram 1999), considerándose el riesgo alto.