Por el paro del Rápido del Sud, vecinos de El Boquerón están sin transporte: “Estamos abandonados”

Por la medida de fuerza, desde el jueves cientas de familias deben gastar grandes sumas de dinero en remise y colectivo. Una empresa de transporte de Batán podría hacerse cargo de algunos viajes.

13 de Mayo de 2019 10:31

Por Redacción 0223

PARA 0223

El paro de choferes de El Rápido del Sud desde el jueves pasado genera problemas cotidianos a cientas de familias de Mar del Plata y la zona, que deben gastar grandes sumas de dinero para poder ir a su trabajo o a la escuela.

Uno de los barrios de General Pueyrredon afectados es El Boquerón, ubicado en el kilómetro 20 de la ruta 88. Allí viven unas 600 familias y los vecinos que no cuentan con movilidad propia, deben tomarse un remise hasta Batán, distante a 10 kilómetros y desde ahí tomarse el colectivo 720 para llegar a Mar del Plata.

Este lunes los vecinos se reunieron en la plaza de la calle 30 entre 5 y 7, para discutir la falta de transporte en el barrio. 

“Normalmente gastamos 90 pesos ida y vuelta pero ahora como está el paro, tenemos que gastarnos $200 en un remise y ahí un colectivo para poder llegar a la ciudad. Lamentablemente hasta el martes, día en que habrá una audiencia en el Ministerio de Trabajo, no hay una solución a corto plazo. Los que tenemos ese dinero, que nos cuesta ganarlo, estamos gastando mucha plata pero hay otros que no pueden hacer semejante gasto diario”, afirmó Celeste, vecina de El Boquerón, en diálogo con 0223.

 "Necesitamos una solución definitiva"

Ante esta problemática, los vecinos se reunieron esta mañana en la plaza del barrio, a la espera de poder encontrar una solución, que podría llegar de manera momentánea, de la mano de la línea 720 de Batán.

“Hay buenas conversaciones con el Claudio Cambareri (subsecretario de Transporte y Tránsito) y con el dueño de la empresa de Batán. Pero necesitan tener un garantizado de unas 40 personas para que la empresa no tenga tanta pérdida. Hay buena voluntad y esperamos a que pueda resolverse una parte del problema”, sostuvo Carlos, otro de los vecinos.

“La realidad es que el Rápido del Sud nos trae problemas una vez por mes pero últimamente son 2 o 3 veces por mes. Cuando hay problemas, nos enteramos en ese momento y la gente llega tarde o pierde el presentismo. Necesitamos una solución definitiva. Cuando suceden cosas así, nos sentimos abandonados”, cerró el hombre.