Tiempos de guerra

Medio Oriente, Ucrania, Hong Kong y Venezuela son parte de un mismo contexto de disputa global entre las principales potencias. 

Donald Trump, presidente de Estados Unidos.

14 de Enero de 2020 08:43

La escalada de tensión entre Estados Unidos e Irán reavivó el debate y la  preocupación vinculada al posible estallido de la tercera guerra mundial. En tiempos de redes sociales, que la tendencia mundial haya sido #WorldWarIII, #WWIII y #TerceraGuerraMundial  amplió la angustia para muchos de los internautas que estuvieron pendiente del minuto a minuto. 

Sin embargo, es necesario decir que eso no ocurrirá, al menos desde la lógica tradicional de las dos primeras contiendas mundiales. Es casi imposible ver a todas las potencias mundiales incursionando en un enfrentamiento directo a la vieja usanza por, al menos, dos motivos fundamentales: la existencia de armas nucleares que, según Vladimir Putin pone la relación de fuerzas entre las potencias en un escenario de paridad estratégica que frena cualquier intentona militar global. El segundo punto es que los conflictos ya existen y forman parte de lo que el Papa Francisco definió como "Guerra Mundial fragmentada".

 

Medio Oriente

Decir que esta región es un hervidero es una absoluta obviedad. No obstante, es importante mencionar que Estados Unidos e Irán tienen varios escenarios de conflicto. En Irak hay tensión desde la guerra entre ese país con Irán luego de la revolución islámica de 1979 cuando los ayaoltah derrocaron al Sha, Reza Palevi, aliado de la Casa Blanca. En ese momento, un tal Sadam Huseim fue el mascarón de proa de Washington en la ofensiva contra su vecino.

La tensión se mantuvo y se agudizó en 2003 cuando las tropas norteamericanas desembarcaron en Irak y Afganistán en la llamada "guerra contra el terrorismo". Desde entonces, Irak fue parte del tironeo entre persas y estadounidenses. 

Mas acá en el tiempo, Siria y Yemen fueron dos teatros de operaciones en el cual Estados Unidos puso en tensión la relación con los iraníes (aliados del líder sirio Bashar Al Assad y los Hutíes yemenies) para fortalecer la incidencia de Arabia Saudita en Yemen y evitar el avance ruso en Siria.

Los acontecimientos en Irak de la semana pasada no son nuevos sino que responden a una continuidad de disputas, un reacomodamiento interno en el esquema de poder norteamericano de los llamados "halcones de la guerra" y, desde ya, con el año electoral en Estados Unidos. 

 

Asuntos pendientes con China

Estados Unidos y China son las dos potencias por excelencia. El avance del gigante asiático en términos comerciales a través de proyectos de infraestructura financiados por el Banco Asiático de Inversiones en Infraestructura (que compite con el Banco de Asia conducido por Japón y apoyado por EEUU) y la política de la nueva ruta de la seda lo convirtieron le permitió aumentar su influencia en Africa, Asia y América Latina.

También, la disputa por el control del 5G abre otro escenario de confrontación por el control del negocio de las telecomunicaciones y la inteligencia artificial. Esto todavía no se dimensiona correctamente pero será parte de los conflictos del futuro no tan lejano. 

China viene sosteniendo la idea de un ascenso pacífico sin confrontar con sus adversarios pero la llegada de Trump tornó la relación más belicosa. Por eso, Pekin invirtió en el crecimiento de su Complejo Militar Industrial que anticipa tres territorios con hipótesis conflicto con Estados Unidos: el Mar Meridional, Hong Kong y Taiwan. 

Sobre el primero, la Casa Blanca sostiene que son aguas internacionales mientras que China reivindica ese territorio como mar propio y por ende, el manejo del 30 por ciento de comercio internacional que pasa por allí.

Mientras tanto, China sigue de cerca el posicionamiento de los norteamericanos en Taiwan donde acaban de ganar las elecciones los independentistas (recordar que Trump llamó a la presidenta al poco tiempo de asumir) y las protestas de Hong Kong en donde el presidente estadounidense manifestó su apoyo provocando la furia china. 

En la medida que Estados Unidos intervenga en estos asuntos que son de interés de China, la potencia oriental avanzará en el sostenimiento de procesos hostiles con la Casa Blanca como Venezuela, Nicaragua, Cuba u otros gobiernos que podrían alejarse del radar de Estados Unidos.

Nueva guerra fría

Con Rusia tambien hay disputas. Las dos mas notorias son Siria y Ucrania. El primer caso, Vladimir Putin decidió sostener a Al Assad para mantener su base militar en Tartus e la caída de un aliado abra la puerta al yidahismo o a Estados Unidos. 

Por su parte, Ucrania se incorporó a la agenda de conflictividad global luego de la salida de Victor Yanukovic tras masivas protestas. Esta crisis derivó en la anexíon de Crimea por parte de la Federación Rusa y el inicio de la guerra por la independencia en la región el Donbás, al este de Ucrania. 

Desde entonces, todos estos tópicos son parte de la agenda bilateral y multilateral mientras la OTAN y el ejercito ruso se miran con desdén en la frontera de Rusia con los países de la ex república soviética. 

Guerra mundial fragmentada

Como vemos, Irak, Siria, Yemen, Ucrania, Venezuela y el mar de China son parte del mismo escenario de disputa global que puede categorizarse como guerra mundial fragmentada guerra subsidiariaguerra proxy que es un tipo de guerra que se produce cuando dos o más potencias utilizan a terceros como sustitutos, en vez de enfrentarse directamente. Por eso guerras y enfrentamientos en varios lugares al mismo tiempo.

Esto tiene múltiples factores, en algunos predomina el factor militar pero también existen aspectos tecnológicos  comerciales, económicos (recursos naturales) y financieros pero existen de hace tiempo y se enfrentan desde que el orden mundial se configuró como multipolar a través del ascenso de China y el resurgir de Rusia que comenzaron a amenazar la hegemonía de Estados Unidos.

Habrán notado que no hice mención a Corea del Norte y sus amenazas constantes. Kim Jong Un demostró que su arsenal militar y nuclear es utilizado mas como mecanismo de defensa ante posibles ataques que como una táctica ofensiva. El rol de China y Rusia y que EEUU no obstaculice el diálogo entre las Coreas son esenciales para enviar un mal mayor. 

Si hay algo que frena un desenlace aún peor es, como dijimos al inicio, la posesión de armas nucleares de todas las potencias que tiene asiento en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Una escalada nuclear terminaría con el mundo en 5 minutos, mientras tanto, el conflicto llegó para quedarse por un largo tiempo. Estamos en tiempos de guerra....desde hace rato.