Plátanos, los causantes de la alergia estacional en Mar del Plata

Presentes prácticamente en toda la ciudad, son los árboles que desprenden una pelusa amarilla a la que el organismo reacciona con tos o un estornudo. El tapabocas se transformó en un aliado en tiempos de pandemia.

7 de Noviembre de 2020 10:38

Por Redacción 0223

PARA 0223

Muchas personas estornudan o tosen al caminar por las calles de Mar del Plata y esa sintomatología no necesariamente está relacionada a la pandemia de coronavirus. Los cambios climáticos propios de la época que aumenta la circulación del polen puede despertar distintas reacciones alérgicas.

Los plátanos de sombra son uno de los árboles que más polen producen y prácticamente están presentes en toda la ciudad. Son árboles resistentes y longevos, que sueltan una pelusa amarilla y unos pequeños plumeritos que son los que causan la sintomatología.

"Los cambios estacionales aumentan la cantidad de polen en los árboles. Se liberan los granos y el viento hace que se eleven lo que hace que las personas reaccionen ante su presencia en el aire", explicó Florencia Baillieau (MP Nº 94815), especialista en Alergia e Innmunologia del Centro de Alergia y Asma de Mar del Plata.

La presencia de alérgenos como el polen en el organismo pueden despertar distintos síntomas respiratorios que se pueden extender durante toda la estación. Rinitis, conjuntivitis y traqueitis son los más prevalentes. 

La profesional remarcó en diálogo con 0223 que el polen "aumenta un montón e inunda toda la ciudad" en este época del año, lo que desencadena en un aumento proporcional de consultas de pacientes que "se exacerban": en su caso, en su consultorio recibe cinco pacientes nuevos por día.

Una vez que se identifica el alérgeno, los profesionales trabajan para que el paciente "se haga menos sensible" a esa sustancia a través de diferentes métodos. El tratamiento más usual es la aplicación de una vacuna "que va aumentando la concentración y dosis semana a semana para que el paciente tolere lo que hay en el ambiente".

Baillieau remarcó que la alergia estacional "altera la calidad de vida" de aquellas personas que la padecen. "Salir afuera es un problema, la vida al aire libre no es placentera", razonó.

En tiempos en los que la pandemia de coronavirus obligó a tapar la boca y la nariz, la alergista señaló que el uso de tapabocas contribuyó a que el alérgeno no choque con la nariz e ingrese en la mucosa. "Se ha notado muchísimo", indicó.

No obstante, el hábito de encerrarse en las casas como medida de prevención para evitar la circulación del virus también generó un incrementó de reacciones alérgicas a productos de limpieza como lavandina o alcohol y a los propios ácaros del polvo.

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