A 71 años de la tragedia en la que murieron 77 Tripulantes del Fournier

El "ARA Fournier" llevaba su nombre en honor del marino que se destacó durante la guerra del Brasil. (Foto: Archivo General de la Nación)

27 de Septiembre de 2020 09:35

Por Marcelo Díaz, creador de Antes de ser calle

 

En estos días se están cumpliendo 71 años de una de las primeras tragedias marinas que enlutó al mundo y a la Argentina en particular. Durante las primeras horas de la mañana del 22 de septiembre de 1949, era imposible comunicarse con el "Fournier" desde la Base Naval Ushuaia. Había zarpado un día antes dispuesto a internarse por el intrincado estrecho de Magallanes para regresar a Ushuaia.

Ese mismo día, desde el buque comunicaron por radiotelégrafo que estaban pasando frente al Faro de Punta Delgada, en la Primera Angostura del estrecho. En horas de la noche, cuando el buque cruzó frente al faro San Isidro, el pronóstico meteorológico ya no era favorable para la navegación: soplaban vientos del noroeste a una velocidad mayor a la prevista, se anunciaban nevadas y chaparrones, la visibilidad era de 2 a 4 kilómetros y la temperatura estaba por debajo de los 0 grados.

La calle que recuerda a la tripulación del buque rastreador ARA "Fournier", en el nomenclador catastral figura como "31" y así es como la siguen denominando los antiguos vecinos y vecinas de los barrios de los que forma parte.  Ellos son: Punta Mogotes, Colinas de Peralta Ramos, Termas Huinco, Cerrito San Salvador, El Progreso,  Fortunato de la Plaza, Bosque Grande, Don Emilio y General Belgrano. 

Más de la tragedia del Fournier

Finalmente, el 4 de octubre de ese mismo año, los diarios del país anunciaron en primera plana el naufragio del "Fournier" en Punta Cono, un accidente geográfico de la isla Dawson, rodeada por canales de entre 450 y 530 metros de profundidad promedio, a la entrada de San Gabriel, 60 millas al sur de la ciudad chilena de Punta Arenas.

Las circunstancias de su desaparición hacen suponer que el "Fournier" se hundió al chocar contra una piedra, no marcada en la carta de navegación, que abrió un surco en el casco de la nave e hizo que se anegaran los compartimientos, o que, en medio de temporal, una ola lo escoró sin darle tiempo a enderezarse.

La tripulación del "Fournier" estaba integrada por 77 personas. No hubo sobrevivientes y el casco quedó para siempre en el fondo del mar. Solo fue posible rescatar los cuerpos de algunos tripulantes.  Dentro de las víctimas se encontraban dos civiles, el físico y químico Raúl Ernesto Wernicke, a la vez suegro y cuñado del Comandante del buque, y uno de sus cuatro hijos, Julio Wernicke.  El científico estaba en la embarcación en búsqueda de especímenes exóticos de la fauna marina austral.

Retrato de Raúl Ernesto Wernicke

El nombre de la embarcación

La denominación del barco, que había sido botada y construida como un dragaminas en el astillero "Sánchez y Cía." en el partido de Tigre. el 5 de agosto de 1939, era un homenaje al marino entonces piamontés, hoy italiano, Cesare Fournier: fue uno de los más temidos corsarios argentinos que tuvo una destacada actuación en la guerra contra el Brasil entre 1826 y 1827.

A lo largo de la traza de la calle se la puede leer de diferentes formas; lo cierto es que se la debe denominar Tripulantes del Fournier, para cumplir con el homenaje a aquellas 77 víctimas de 1949, antes de ser calle.