Segunda ola de coronavirus: "No tendría ningún sentido volver a un cierre total como en el 2020"

Ante un posible rebrote de contagios, desde el shopping Los Gallegos anticiparon su pedido para no retroceder a la "situación lamentable" que se vivió el año pasado. "En este verano no se generó ningún colchón para subsistir", advirtieron. 

13 de Marzo de 2021 08:10

Por Redacción 0223

PARA 0223

Distintos infectólogos y especialistas coinciden en que va a ser una realidad el aumento de casos de coronavirus en poco más de un mes en todo el país. La llegada de las bajas temperaturas, la vuelta a clases y la aparición de nuevas cepas aparecen como algunos de los fundamentos más sólidos para trazar estos pronósticos adversos. Pero referentes del comercio marplatense, ya se anticipan a otra posible crisis sanitaria y descartan la posibilidad de que se vuelva a producir un "cierre total" de la actividad como ocurrió a partir de marzo del 2020.

"Si llegase a ocurrir un cambio en la condición epidemiológica y en el número de enfermos, ya hay mucha más experiencia con relación a lo que pasaba hace exactamente un año. La verdad es que uno no cree que vuelva a haber un cierre total", consideró, en primer lugar, Marcel Otero Lacoste, gerente del shopping Los Gallegos.

En declaraciones al programa Dixit que se emite por 0223 Radio, el responsable del emblemático paseo comercial insistió en que "no tendría sentido" disponer un nuevo cierre masivo ante un aumento en los contagios y pidió a las autoridades que "no vuelvan a la situación lamentable del 2020". "Este es el sentir que tiene la mayoría del comercio en la ciudad", aseguró.

Otero Lacoste señaló, en este sentido, que no se han registrado contagios entre los mismos integrantes de la planta laboral de más de 700 personas que cumple funciones en el shopping, lo cual valoró como un "aspecto muy positivo que marca que la gente no se contagia en el espacio de trabajo". "Sí tuvimos casos positivos pero ninguno en donde un empleado haya contagiado a otro compañero. Y eso mismo también se puede ver en los supermercados y en la mayoría de los comercios", aseveró.

El empresario, en este marco, resaltó que es "muy importante" matener vigente todos los protocolos de cuidado que diagramaros las autoridades sanitarias por el contexto de pandemia y que "la gente lo respete y que se sienta cuidada". "En eso tampoco tuvimos inconvenientes. Cuando vemos a alguien sin barbijo y le pedimos que se lo pongan, acceden sin hacer ningún reproche", reconoció.

Al insistir con su postura, Otero Lacoste también puso énfasis en que en este año Mar del Plata no vivió una temporada que "permitiera genera un colchón económico como para subsistir" en meses con facturación nula. "El año pasado veníamos de una temporada muy buena, que inclusive fue mucho mejor que los veranos anteriores, y eso nos ayudó pero este verano no pasó nada de eso. Ni la gastronomía ni ningún otro rubro pudo generar alguna diferencia para absorber otro parate total", recordó.

Para el representante de Los Gallegos, la última temporada recién arrancó a partir del 20 de enero y la catalogó como "muy difícil" por la "campaña de desprestigio" contra la ciudad y la consecuente caída en la afluencia de turistas. "El 15 de enero hubo un medio de Buenos Aires que dijo que se cerraba todo. Así empezamos... Y la gente se animó a venir a partir del tercer fin de semana de enero. Después estuvo Carnaval, donde el clima fue malo pero a nosotros nos ayudó particularmente, y la temporada terminó ahí", sintetizó.

En el contexto de la crisis económica que todavía se vive por la irrupción del Covid-19, Otero Lacoste confirmó que sufrió la baja de "distintas marcas" en los últimos meses aunque también destacó la incorporación de otras nuevas recientemente. "El complejo de a poco se va normalizando para mantener una oferta completa y variada, tanto en el patio de comidas como en el plano del entretenimiento. Esperamos tener nuevas sorpresas a lo largo del año si todo sigue bien", manifestó.

Otero Lacoste reveló que, hoy en día, el shopping funciona al 60 por ciento de su capacidad histórica habitual, más allá del protocolo que se dispuso para no permitir la circulación de más de 800 clientes dentro del edificio. "Si un día normal estábamos con 22 mil personas por día, hoy lo máximo pueden ser 12 mil o 13 mil personas. Pero eso es infinitamente más que cero. Y vemos que de a poco la gente va volviendo porque antes estábamos al 40 por ciento", afirmó.