Juzgarán a cinco policías por el crimen de Luciano Olivera

La Justicia de Garantías mantuvo la calificación propuesta por la fiscal Ana María Caro. Maximiliano González será juzgado como autor y el resto por encubrimiento y falso testimonio. 

El menor fue asesinado de un disparo en el pecho cuando circulaba en moto en la madrugada del 10 de diciembre.

17 de Noviembre de 2022 16:06

Por Redacción 0223

PARA 0223

Tras el cierre de la investigación y el pedido fiscal, en las últimas horas la Justicia de Garantías elevó a juicio la causa por el asesinato del adolescente Luciano Olivera ocurrido en diciembre del año pasado en la ciudad de Miramar. El efectivo Maximiliano González está imputado del delito de homicidio triplemente agravado por ser cometido por un miembro de una fuerza de seguridad, mediante el empleo de un arma de fuego, y con alevosía.

Fuentes judiciales consultadas por 0223 confirmaron que en la resolución se mantuvo la calificación encubrimiento doblemente agravado y falso testimonio para los policías Nelson Albornoz, Kevin Guerricagoitia y Rocío Mastrángelo y de encubrimiento doblemente agravado para Alejandro Cepeda. La única diferencia en la resolución si se la compara con el pedido de la fiscal Ana María Caro es que no decidió que se juzgue a María Estela Mendoza por incumplimiento en los deberes de funcionario público.

La titular de la Unidad Fiscal Descentralizada de General Alvarado apelará esa última decisión, mientras que la próxima semana las defensas de los imputados definirán su postura. 

Gatillo fácil 

En la madrugada del 10 de diciembre, un móvil del Comando de Patrullas de Miramar acudió tras un llamado al 911 al anfiteatro ubicado en el centro de la ciudad y comenzó a perseguir la moto Yamaha YBR 125 que manejaba Luciano Olivera hasta la avenida 9 entre calles 34 y 32.

La víctima se encontró de frente con otro patrullero, una camioneta Toyota Hilux de la que descendieron tres uniformados. En ese momento Maximiliano González –que estaba ubicado en la parte trasera izquierda del rodado- le apuntó con su pistola marca Bersa calibre 9 milímetros -que contaba con 14 municiones- y le disparó a una distancia mayor a un metro.

Tal como se informó oportunamente, las pericias determinaron el normal funcionamiento del arma en los seguros y en el resto de los mecanismos, lo que descartó el supuesto disparo accidental que el imputado les dijo a sus compañeros. González, por esta fecha, también sigue con prisión preventiva.