Pablo Bertoni, el hombre que busca llevar a Mar del Plata a una de las cimas más altas

Tiene 54 años y se prepara para el desafío más importante de su vida deportiva: escalar el Himalaya.

10 de Julio de 2022 16:31

¿Qué pasará en el Himalaya a 7.500 mts de altura en el día 32 de expedición cuando la nieve tape el techo de la carpa? Es una pregunta que desde hace seis meses Pablo Bertoni se repite mientras realiza su rutina de entrenamiento para llegar lo mejor preparado posible al mes de septiembre, cuando los Sherpas lo lleven al campo base ubicado a 100 km de Katmandú para comenzar la mayor travesía de su vida: escalar una de las montañas más altas del mundo.

Pablo encontró hace casi 30 años en el montañismo su hobbie. Empezó a escalar cuando era adolescente junto a un primo que visitaba en la localidad de Balcarce. En aquel entonces “nos trepábamos a todo lo que encontrábamos” y con los años comenzó a dedicarle más tiempo a este deporte. Para sus 20 años ya había escalado las sierras cercanas y se disponía a cumplir su primer desafío: Hacer cima en el Lanin.

Desde entonces no tuvo techo. Le siguieron el Aconcagua y otras 40 montañas alrededor del país, pero en su deseo de superación se propuso escalar las montañas más emblemáticas del mundo. Así, en 2014 hizo cumbre en el Mont Blanc -el punto más elevado de la Unión Europea- y tres años mas tarde alcanzó el Matterhorn - pico más famoso de los Alpes suizos-.

“El Himalaya es uno de los Grand Slam del montañismo”, dice en diálogo con 0223 en un alto de su entrenamiento de running, una de las disciplinas que practica a diario y que por estos días intensifica para lograr una mejor performance al momento de escalar los 8 mil metros que separan la base del pico de la montaña nepalí.

Desde hace seis meses, Pablo entrena a diario en running y natación, dedica además seis turnos semanales a complemento deportivo en gimnasio y sube las sierras y las lomas de la ciudad “con peso” para ganar fuerza en las piernas. “La principal complicación que tenemos es la falta de oxígeno, así que de los 7.500 mts para arriba vamos a usar tubos de oxígeno”, dice.

Pablo habla en plural porque esta travesía "no la encara" solo. "Somos cuatro montañistas: dos cordobeses, un costarricense y yo que soy el único marplatense", cuenta al tiempo que detalla que tienen pensado viajar a fines de agosto y volver a la Argentina durante la primer quincena de octubre. Aunque al llegar a Nepal, tras cuarenta horas de viaje, se sumarán al equipo dos guías Sherpa que serán los encargados de trasladar la aprte pesada del equipaje de los excursionistas hasta el campamento base ubicado a 100km de Katmandú. "Ellos son los que arman el campamento, después para subir nosotros en la mochila llevamos las sogas, carpas, camperas, ropa", cuenta.

Consultado sobre si, además del preparamiento físico, trabaja con un psicólogo deportivo para enfrentar el desafío, Pablo confiesa que no, aunque lo pensó en algún momento. "Es algo que quizá tendría que hacer porque hay mucho de psicológico también. Soy bastante fuerte, no es porque me haga el canchero, pero llevo bastante tiempo en esto y sé que hay momentos en los que puede ser difícil. Cuando empecé a preparar esta expedición no te voy a negar que me pregunté que va a pasar cuándo esté a 7.500mts en la carpa sol, en el día 32 y tapado de nieve hasta el techo", dice entre risas al tiempo que reconoce que para él en esta oportunidad, abandonar la expedición "no es una opción". "Estás a 8.000mt, no tenés un ascensor para bajar, podés pedirte un helicóptero, pero eso trae un montón de variantes que no considero viables", dice mientras repara en que cuenta con el apoyo de toda su familia al momento de emprender cada aventura.

Por último, Pablo cuenta que, con su hobbie, aunque está directamente relacionado en el común imaginario a la práctica de un deporte individual busca "llevar a Mar del Plata a los lugares más emblemáticos del mundo".