Cuidacoches: se allana el camino para una regulación aunque con un contrapunto a resolver

Se evidenció una base de acuerdos para proyectar la sanción de una ordenanza. Sin embargo, el gobierno defendió el requisito de no contar con antecedentes penales para estar habilitado y hubo polémica con los trabajadores.

Concejales, trabajadores y funcionarios: los tres sectores debatieron sobre el proyecto. Foto: 0223.

1 de Septiembre de 2022 15:00

Por Redacción 0223

PARA 0223

Con la presencia de concejales, funcionarios y trabajadores de la economía popular, el Concejo Deliberante inició este jueves el debate para sancionar una ordenanza que regule la actividad de los cuidacoches, donde se evidenciaron importantes principios de acuerdos, aunque también un contrapunto que amenaza con dificultar el tratamiento.

“Esta es una problemática que tiene que ver con la seguridad ciudadana y no con el trabajo”, afirmó el concejal del Pro, Agustín Neme, marcando con franqueza el choque entre los enfoques desde los cuales se analiza el fenómeno cultural, social, económico y político de los cuidacoches. Previamente, tanto el bloque del Frente de Todos como integrantes del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) -donde se organizan decenas de cuidadores de vehículos-, habían abordado el tema desde la perspectiva de la economía popular, donde se destacaron los relatos en primera persona de las experiencias de los integrantes de la rama Cuidacoches de la organización social.

Decenas de cuidadores siguieron el debate desde la "barra" del Concejo Deliberante. Foto: 0223.

“No estamos de acuerdo con que alguien salga de la cárcel y al otro día esté trabajando en la calle”, agregó el secretario de Seguridad, Martín Ferlauto, quien expresó la mirada del gobierno de Guillermo Montenegro. La referencia es al aspecto propuesto en el proyecto del oficialismo para que sea requisito excluyente el no contar con antecedentes penales para poder obtener la credencial para desempeñarse como cuidacoches. El funcionario también hizo hincapié en la necesidad de controlar la actividad, donde deberá velarse por el cumplimiento de las normas a implementar: “si no es con la razón, deberá ser por la fuerza”, resaltó, planteando la necesidad que en la ordenanza se establezcan las sanciones y hasta penas de prisión previstas para infractores.

La postura reinstaló los fantasmas que acompañaron al debate por la Zona Roja, por lo que generó rechazos, como el del concejal Roberto Páez. El edil del Frente de Todos expresó el “sabor amargo” que le dejó el planteó de Ferlauto y dijo que “hay un afán estigmatizante cuando se habla así de sanciones”. La posterior intervención del referente del MTE de Mar del Plata, Paco Lemma, generó una gran ovación del público, el cual, a partir de su propia experiencia de vida y del trabajo realizado por la organización en cárceles, relató cómo la economía popular cumple el rol ausente del Estado de resocializar a personas en conflicto con la ley.

El propio Frente de Todos reconoció que dicho aspecto es el gran tema a resolver e incluso se mostró dispuesto a trabajar alguna formulación que contengan a todos los sectores. Por su lado, el presidente del bloque de Acción Marplatense, Horacio Taccone, también advirtió que habrá que encarar la complejidad que representa, aunque advirtió que la propia Constitución Nacional establece que la cárceles no son para castigo, sino para resocializar. Incluso el bloque de la UCR mostró cierta distancia del Pro: “no todo se resuelve con represión”, advirtió el concejal Daniel Núñez.

 

Base de acuerdos

“Nos proponemos salir de las discusiones definidas para construir una reglamentación que contenga a distintas visiones, en busca de consensos”; propuso Sol de la Torre (FdT), quien presidió la jornada de trabajo, además de ser una de los autoras de los tres proyectos con estado parlamentario. Los otros corresponden a Juntos, uno de la UCR y el restante del Pro.

Fue su compañero Roberto Gandolfi quien pasó en blanco los puntos de acuerdo que se transparentan al cotejar los tres proyectos. Entre ellos destacó el requisito de tener residencia en General Pueyredon para que el cuidacoches sea habilitado, quien además deberá registrarse y contar con una credencial.

Cuidacoches expusieron su puntos de vista ante los funcionarios municipales. Foto: 0223.

En tanto, el aporte que los vecinos le entreguen a los trabajadores por el servicio de cuidado deberá ser voluntario y en el momento del retirar el vehículo, a la vez que se pretende generar algún mecanismo factible por el cual los vecinos puedan denunciar irregularidades. Por caso, se busca atacar aquellas situaciones donde un cuidacoches tenga una actividad extorsiva o se encuentre bajos los efectos del alcohol o drogas ilegales.

Finalmente, también se quiere impulsar la realización de capacitaciones a cargo de la Municipalidad, para que los cuidacoches también puedan ofrecer otro tipo de acompañamientos tanto a locales como turistas. Uno de los puntos se orienta a la capacitación en primeros auxilios y RCP, como así también para tener conocimientos mínimos respecto a los atractivos turísticos de la ciudad.