Video: panadera sacó a cuchillazos a un ladrón armado que le robó dos días seguidos

La secuencia tomada por las cámaras de seguridad del local muestran la valentía de la panadera, y el riesgo de muerte que corrió al enfrentar cara a cara, armada con un cuchillo, a un ladrón que portaba un revólver y que se fue con el dinero que había en la caja y varias heridas en su espalda. El violento episodio quedó grabado y la víctima relató que actuó por "instinto".

Todo ocurrió el lunes por la tarde en el barrio La France de Córdoba y no era la primera vez que pasaba. La reacción de la panadera se entiende en parte porque el día anterior el mismo ladrón había ingresado al local, amenazó a la propietaria y se llevó la recaudación. Cansada, en el segundo asalto, la mujer, pese a que se encontraba sola, se resistió y se negó a darle el dinero.

El video muestra cómo el delincuente entra al local y extrae de una bolsa un arma con la que apuntó a la panadera. Ella sacó el dinero de la caja y, sin que el ladrón se diera cuenta, agarró un cuchillo. Si bien al principio lo deja actuar y que se lleve unos billetes, no pudo aguantarse y lo atacó mientras forcejeaban por varios segundos.

En las imágenes se ve cómo la panadera alcanzó a herirlo en varias oportunidades mientras gritaba pidiendo auxilio. El delincuente la golpeó, la pateó y la empujó varias veces contra los mostradores pero nunca le disparó.

En diálogo con Arriba Córdoba (El Doce), Cintia, la propietaria, aseguró que reaccionó así por la impotencia que le generó el nuevo robo: “No lo pude controlar. Quise hacerme a un lado, pero la emoción me llevó”. Además, reconoció que “no fue lo más razonable”, pero que actuó por “instinto”.

“Uno se cansa de trabajar todos los días para los chicos, para uno, para todo el mundo y que te quieran sacar lo poco que tenés. Me cuesta un montón mantener la panadería, entonces los impulsos me llevaron a eso”, lamentó la víctima.

“Alguien me ayudó, lo golpeó en la calle”, relató Cintia, quien no pudo conseguir que el delincuente escape sin el botín: se llevó su celular y el cambio que había en la caja.

“Yo intentaba retenerlo, no es que quería golpearlo. Quería agarrarlo para darle tiempo a la Policía”, confesó la panadera, todavía en estado de shock, al punto que aún no quiso ver los videos.