El clima hostil comienza a dominar la agenda política de Mar del Plata

Luego del escándalo por la cesión de tierras en El Marquesado, el clima político en la ciudad mantiene constantes enfrentamientos entre el oficialismo y la oposición. 

Este miércoles se realizó el desalojo del predio tomado en Las Heras.

5 de Abril de 2023 20:20

Definitivamente la política de la ciudad activó el modo campaña y la hostilidad comienza a dominar la escena local. No es novedoso el escenario cuando se acercan las fechas definitorias del calendario electoral, pero el clima bélico esconde un riesgo: la tolerancia de la ciudadanía a las peleas de la política está al límite.

Luego de una semana con Mar del Plata en el centro de la escena nacional por la polémica cesión de un predio de 140 hectáreas en El Marquesado por parte de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (Aabe) a una organización vinculada a Juan Grabois, las peleas pasaron al plano doméstico.

La sesión del Concejo Deliberante sirvió para cerrar (al menos por ahora) el capítulo de El Marquesado. Habló una vecina que rechaza el proyecto y el sociólogo Roberto Cittadini, de larga trayectoria en Inta, en su defensa.

El oficialismo inició sus exposiciones con munición pesada, pero encontró al Frente de Todos con espíritu zen: Sol de la Torre eligió hablar de la importancia de potenciar los modelos agroecológicos y evitó hacer una defensa de Grabois para evitar un ida y vuelta desgastante (para el FdT) con el interbloque de Juntos por el Cambio.

Tal fue el giro del discurso de la concejal que tanto Angélica González (Coalición Cívica) como Fernando Muro (PRO) adhirieron a muchos de los planteos aunque remarcaron que el conflicto no se había desatado por el proyecto productivo en sí, sino por la polémica entrega de un campo frente al mar a una organización cercana al gobierno nacional.

Más allá de que hasta que surjan novedades judiciales la polémica parece haberse apaciguado (los integrantes del MTE abandonaron la pretensión de instalarse en el lugar), en los días siguientes surgieron nuevas focos de conflicto.

La concejal Virginia Sívori aprovechó la aprobación por parte del cuerpo legislativo de un convenio ente la provincia y el municipio por más de 600 millones de pesos para la pavimentación de calles para instalar un nuevo debate: ¿por qué el municipio les cobra a esos vecinos a través del sistema de contribución por mejoras la pavimentación de una calle si ya tiene los fondos asignados?

Para zanjar ese debate, la concejal presentó un proyecto de ordenanza para que en los casos en que las obras tengan financiamiento de provincia y Nación el Ejecutivo no pueda utilizar la herramienta de contribución por mejoras. “Montenegro les cobra a los vecinos el asfalto que ya pagó la provincia”, planteó Sívori.

La herramienta se ideó hace años y servía para que los propios vecinos pudieran impulsar el asfalto en sus cuadras. El gobierno local les cobraba un anticipo de obra y luego a través de un sistema de cuotas financiaba el resto de la obra. El argumento es que una propiedad en una calle asfaltada tiene más valor, por lo que el Estado no debía ser el único el absorber el costo para una obra que beneficiaba económicamente a los vecinos.

Sin embargo, Sívori expresó su desacuerdo en que se aplique cuando los fondos para hacer las obras llegan desde Nación o Provincia. Y dio un dato que resonó: con esta herramienta sólo se asfaltan cuadras en las que los vecinos tienen la posibilidad de pagar un anticipo que roda los 20 mil pesos por cada uno. “Entonces, los sectores más vulnerables nunca van a tener asfalto”, se quejó.

La respuesta llegó por parte de Mariano Bowden, presidente del Emvial, quien le apuntó al Frente de Todos por intentar desfinanciar al ente. El funcionario señaló que el cobro del adelanto y de las siguientes 48 cuotas (las primeras 24 sin interés y el resto con un aumento de 1% sobre el saldo) está lejos de cubrir el costo de la obra en tiempos de inflación de tres dígitos, pero le permiten al Emvial tener recursos para realizar tareas en la ciudad.

“Mantenemos el esquema para tratar de engrosar el fondo Mejorar y hacer mantenimiento y más cuadras y poner a todos los vecinos en un manto de igualdad”, sostuvo Bowden a 0223.

Esta discusión seguirá, pero algunas horas después, con un estilo más explosivo Alejandro Rabinovich sacó otro tema del archivo para cuestionar al Frente de Todos en general y a su referente en Mar del Plata, Fernanda Raverta, en particular.

“Guzmán era ministro cuando anunciaron la construcción del espigón en el puerto de Mar del Plata. Todavía se usaba barbijo. Fue hace 2 años y 2 meses atrás”, disparó. El senador provincial de Juntos por el Cambio y mano derecha del intendente pidió “acordarse de las promesas que nunca cumplieron”.

Montenegro elige metódicamente cuándo y dónde lanza una frase picante contra sus principales adversarios políticos. Rabinovich, en cambio, camina con un lanzallamas siempre listo para atacar al kirchnerismo.

“La postura marca a las claras que el oficialismo en Mar del Plata no tiene nada para mostrar”, replican en el FdT.

Este miércoles se cerró otro capítulo que había dado mucha tela para cortar: una nueva toma de terrenos en el barrio Las Heras. Sin incidentes y con mucha presencia policial, los pocos vecinos que quedaban en los terrenos de Tetamanti y Fortunato de la Plaza abandonaron el lugar.

La titular de Anses, Fernanda Raverta, aprovechó una entrevista en Canal 8 para desestimar las acusaciones del gobierno municipal sobre la injerencia del FdT en las tomas. “Estoy absolutamente en contra de las tomas”, sostuvo.

La líder del Frente de Todos, que reiteró una vez más que irá en busca de la Intendencia de la ciudad en las próximas elecciones, también planteó que además de solicitar el desalojo a la justicia se preocuparía por gestionar fondos para resolver los problemas habitacionales de Mar del Plata. Desde su bloque de concejales ya habían cuestionado al intendente por la falta de gestión en ese sentido: en la ciudad no hay planes de viviendas para los sectores más vulnerables.

En el oficialismo argumentan que es una muestra más de la discriminación que sufre la ciudad, mientras que en la oposición le recuerdan que intendentes del PRO de otros distritos llevan adelante planes de vivienda financiados por la Provincia y la Nación. Un contrapunto ya habitual en la política de Mar del Plata que cada semana se profundizará más y más.