Es marplatense y descubrió su autismo a los 35 años: "Era una Mac pero tenía Windows"

Agustín es profesor de letras, actor y activista autista. En diálogo con 0223, reflexiona sobre las implicancias de un diagnóstico siendo adulto, el impacto en la vida de las personas y qué se puede hacer para lograr una verdadera convivencia en sociedad. 

Agustín Barovero es actor, docente y activista autista.

5 de Agosto de 2023 08:16

Por Redacción 0223

PARA 0223

La Organización Mundial de la Salud define a los trastornos del espectro autista (TEA) como un grupo de afecciones diversas. Las personas que conviven con TEA se caracterizan por tener algún grado de dificultad en la interacción social y la comunicación. El espectro autista es amplio y es importante, tanto en niños como en adultos, llegar al diagnóstico y tener acceso a información, para que no haya un estigma y para poder convivir socialmente.

El viernes pasado la conductora del programa "Todas las Tardes", Maju Lozano, se despidió del ciclo después de siete temporadas al frente y contó que fue diagnosticada con autismo a sus 51 años. Según explicó Lozano saber esto le permitió entender muchas otras cosas que le sucedían. 

Pero no es el único caso, de hecho cada vez hay más personas que son diagnosticadas de adultas. En Mar del Plata, por ejemplo, Agustín Barovero también supo que era autista a sus 35 años, y ahora utiliza las redes sociales como canal de difusión y concientización sobre el autismo. Tiene más de 65 mil seguidores y gracias a su formación y a sus dotes actorales crea contenido audiovisual que, en algunos casos, tiene millones de reproducciones. 

En diálogo con 0223, el marplatense que se define como "docente, actor y autista" comparte su experiencia al enterarse del diagnóstico y la importancia de informar sobre el tema.  

- ¿Qué es el autismo?

El autismo es un neurotipo; para graficarlo es un “cableado” distinto de nuestro cerebro al de las personas neurotípicas. El paradigma de la neurodiversidad entiende que no hay dos cerebros iguales; aún así, para la medicina todo lo que se sale de la norma es catalogado como “trastorno” (y así figura en los manuales de psiquiatría). Las estadísticas actuales muestran que 1 persona cada 36 es autista, es decir que cada 100 personas más o menos 3 son autistas (lo sepan o no). Es un neurotipo pero no es algo raro, es parte de la diversidad humana. Como decía antes no hay dos cerebros iguales y en el espectro autista sucede lo mismo: no hay dos personas autistas iguales. Existen algunos rasgos que podemos reconocer dentro del espectro autista que en cada persona se manifiesta de forma distinta, por ejemplo: la manera de procesar el lenguaje, la socialización, la sensibilidad sensorial, intereses especiales e hiperfocos.

- ¿Qué implica conocer el diagnóstico en la adultez? ¿Qué impacto tiene?

Implica una revisión absoluta de toda nuestra vida, en muchos casos es como un volver a nacer, un segundo cumpleaños. Cuando uno vive buena parte de su vida como una persona neurotípica, hay mucho ahí para volver a procesar. Se hace una analogía a veces con sistemas operativos o manual de instrucciones para ilustrarlo: decimos cosas como "viví toda mi vida como una licuadora pero en realidad era una batidora" o "era una mac pero tenía windows" (risas).

Una vez que uno recibe el diagnóstico se explican muchas cosas, revisando nuestra historia personal y resignificando todo. Revés cosas que pasaron, y en algunos casos te perdonás y perdonás a tu entorno por no haber sabido manejar algunas situaciones. En lo inmediato es una revelación absoluta, que genera euforia y desconcierto por igual. Es un redescubrirse porque entendés cómo funciona tu cerebro, y para qué cosas tenés más o menos predisposición, habilidades y capacidades. Y se abre a futuro una perspectiva de felicidad que antes era impensada.

- Sos un comunicador sobre autismo en tus redes ¿Qué rol tiene la concientización sobre el tema para vos?

La comunicación de información es crucial. Hace 5 años escuché una entrevista en la radio a una autista diagnosticada de adulta y algo hizo click en mí, me reconocí en muchas cosas que contaba. Hace 2 años y pico volví sobre el tema, empecé a investigar y realmente no había tanta información como hoy al respecto. Indagué más hasta que di con una profesional especializada en diagnóstico de autismo, cosa que era muy difícil. Hice el proceso de evaluación y bueno resultó que era súper autista (risas). Soy consciente de que fui muy afortunado, de llegar a la información, poder conseguir el contacto, acceder a la práctica y afrontarlo económicamente. Todo esto lo reconozco como un privilegio de clase, por eso creo que es muy importante la labor de divulgación o concientización, porque implica que otro se puede reconocer en ese testimonio, en esa comunicación, porque llegar al diagnóstico es un proceso muy largo. Y hay personas que por no saber que son neurodivergentes la pasan mal y muchas quedan excluidas de los circuitos de formación, de socialización y de inserción laboral. Es una deuda social enorme.

En Mar del Plata este año el Honorable Concejo Deliberante aprobó una ordenanza que se llama "La hora silenciosa", que implica que los comercios tengan un horario para atender a personas con TEA. Fomenta que los negocios disminuyan la intensidad lumínica y sonora una hora diaria dos veces por semana, para ser amigables con quienes conviven con este espectro.