Felipe Pigna presenta su minuciosa biografía de Martín Miguel de Güemes

Con el característico estilo de Felipe Pigna, ameno y coloquial, pero sumamente riguroso en la investigación, Los Güemes y la guerra de los Infernales (Planeta – 2023) busca devolverle a Martín Miguel de Güemes su dimensión épica y heróica.

Güemes fue compañero y confidente de Manuel Belgrano, pero también aliado de José de San Martín. Su función fue clave: resistir las embestidas de los realistas que venían desde el Alto Perú. Según el propio autor, “San Martín sostuvo que sin Güemes no había cruce de Los Andes”.

El plural del título corresponde a que don Martín Miguel no estaba solo. Más allá de los Infernales, aquellos gauchos a los que les dio estructura militar, estaban su madre Magdalena, su amada Carmencita Puch y su hermana Macacha, quien era su mano derecha.

“Macacha, por su parte, era una mujer con ideas propias, que tenía cualidades de estratega y organizadora. Participó activamente en la Guerra Gaucha, de modo que cuando Güemes fue electo gobernador, ya tenía un nombre propio en la vida política de su provincia natal. A partir de entonces, ella se transformó en mano derecha y consejera de su hermano. Trabajó a la par casi como una suerte de ministra o secretaria de Estado, reemplazándolo en los períodos en los que el caudillo estaba en campaña”, cita el libro.

Dice Pigna que, “Las opiniones y acciones de Macacha eran respetadas tanto por el caudillo salteño como por otros jefes militares. También por los gauchos y los sectores populares que le tenían gran afecto por la generosidad con que solía ayudarlos en los tiempos difíciles de guerra, por eso comenzaron a llamarla “Madre del pobrerío”. Esto va en correlación con la forma en que llamaban al propio Güemes, Padre de los pobres. Pigna lo aclara con una nota al pie: “Bernardo Frías señala que Güemes ‘Se mostraba víctima generosa de su causa, de lo que llamaban la causa de los pobres, y al propio tiempo que se despertaba en ellos un resentimiento airado contra la clase culta, les nacía por Güemes una filial ternura; por lo que llegaron a darle el nombre de Padre de los pobres”.

De Güemes no hay retratos tomados en vida. El historiador asegura que “solo imágenes reconstruidas a partir de la memoria de quienes lo conocieron, combinadas con las fotografías de sus descendientes”. Según se dice, él no lo permitió para pasar desapercibido y protegerse de sus tantos enemigos.

Güemes fue dejado afuera de la historia oficial durante más de 60 años. Su rol y su protagonismo fueron ninguneados, al punto de que solo era recordado en Salta por su propia familia y algunos más. Del libro se desprende que, “Recién en junio de 1885, sesenta y cuatro años después de su muerte y por iniciativa del doctor Ángel Justiniano Carranza, que era porteño, Güemes recibió un primer homenaje oficial”.

Martín Miguel de Güemes tuvo que esperar hasta el 2 de agosto de 2006 para ser reconocido y declarado Héroe Nacional con la sanción de la ley 26.125. Así se lo ubicó junto a San Martín y Belgrano.

Los Güemes y la guerra de los Infernales, de Felipe Pigna, busca contribuir a la “supervivencia del olvido” de este “único general argentino de toda nuestra historia abatido en combate”.

(*) Felipe Pigna presentará Los Güemes en el ciclo Verano Planeta este próximo miércoles 10 de enero a las 21 en el hotel Costa Galana, ubicado en Boulevard Marítimo Patricio Peralta Ramos 5725.