Alerta en Chascomús: la acacia negra se expande y complica al campo

Autoridades buscan controlar una especie que tiene una gran capacidad de adaptación genética y a la vez genera graves problemas ecológicos y productivos.

Un ejemplar de la acacia negra. (Foto ecoregistros.org)

20 de Agosto de 2024 16:01

Por Redacción 0223

PARA 0223

Desde hace varios años que la acacia negra (Gleditsia triacanthos), una especie arbórea que se introdujo en la Argentina desde Estados Unidos a principios del siglo 19, es motivo de preocupación en el país a partir de su agresiva invasión de diferentes ecosistemas.

La situación mereció incluso la realización de un estudio hace media década por parte de investigadores de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (Fauba), atentos a la problemática que la acacia genera en los productores agropecuarios.

Debido a su rápido avance sobre tierras productivas, con costos para erradicarla muy elevados, en el partido de Chascomús se pusieron en alerta y activaron el trabajo de la comisión municipal de lucha contra las plagas.

En consecuencia autoridades de la comuna llevaron adelante una reunión recientemente en el área de desarrollo productivo destinada a avanzar en el control de la acacia y establecer un plan de mapeo para identificar áreas críticas.

Autoridades reunidadas en Chascomús para analizar los pasos a seguir en torno a las acacias negras.

Participaron de la misma el titular de la Secretaría de Gobierno, Cipriano Pérez del Cerro; la subsecretaria de Desarrollo Turístico y Productivo, Jimena Arano; y la directora de Desarrollo Productivo, María Eugenia Pietrantuono, junto a su equipo técnico y representantes de instituciones locales.

Durante el encuentro, se discutieron estrategias y planes de acción para combatir a esta especie invasora que tiene gran presencia en la región. Los asistentes coincidieron en la importancia del trabajo conjunto para mitigar el impacto de la acacia negra sobre los caminos rurales.

El plan propuesto se enmarca dentro de la ordenanza 5323/18, que establece el manejo y control de especies invasoras y que ya tuvo un episodio destacado de gestión años atrás, en el marco de la reducción de la población de cotorras.