Sorpresa por la muerte de un histórico personaje de Los Simpson
Tuvo su primera aparición en la segunda temporada. La noticia, confirmada por los productores de la serie, generó oleadas de reacciones, confusión y debate en redes sociales.
Por Redacción 0223
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Los Simpson han moldeado la cultura televisiva durante más de tres décadas, con su humor ácido y una galería de personajes entrañables que acompañaron a generaciones enteras. Cada giro de sus historias, cada referencia pop y cada broma visual mantienen a la serie vigente en el imaginario colectivo. Ahora, el universo amarillo vuelve a sacudir a sus millones de seguidores confirmando la muerte de un personaje histórico.
Alice Glick, la emblemática organista de la Iglesia de Springfield, se despidió recientemente en el episodio “Sashes to Sashes” de la temporada 37. La noticia, confirmada por los productores de la serie, generó oleadas de reacciones, confusión y debate en redes sociales.
La muerte de Alice Glick marca el final de un ciclo de 34 años y 35 temporadas, ya que este personaje hizo su primera aparición en 1991, durante la segunda temporada de la serie, en el episodio “Three Men and a Comic Book”. En aquella ocasión, fue interpretada por la legendaria actriz Cloris Leachman, quien dio vida a la viuda anciana que contrataba a Bart para realizar tareas hogareñas a cambio de cincuenta centavos, envolviendo su debut en un aura cómica y entrañable.
Con el fallecimiento de Leachman en 2021, la consagrada actriz de voz Tress MacNeille asumió el rol para las siguientes décadas. No obstante, durante el episodio emitido el 16 de noviembre, la audiencia presenció cómo Alice Glick colapsó repentinamente sobre el órgano durante un servicio religioso, impactando a Reverendo Alegría y toda la congregación, incluida la familia Simpson.
“En cierto sentido, Alice, la organista, vivirá para siempre a través de la música que creó. Pero en otro, más importante, sí, está tan muerta como un clavo”, confirmó el productor ejecutivo, Tim Long, a la revista People.
La decisión generó conmoción, debido a que Glick había sido objeto de confusión en el pasado. En la temporada 23, fue aparentemente “asesinada” por una mascota robótica, solo para regresar tanto como personaje humano como en forma de fantasma en capítulos posteriores, lo que llevó a muchos seguidores a considerar aquella muerte un hecho no canónico. No obstante, esta última escena se presentó como el punto final para la longeva habitante de Springfield.
“Supongo que esto muestra que la gente sigue preocupada por Marge y por todos los personajes”, sostuvo Selman. A pesar de las críticas y lamentos, para los productores la reacción del público es señal de la vigencia de la serie.
Estas controversias demuestran que las vidas, y muertes, de los habitantes de Springfield continúan generando identificación e interés. “Los Simpson no tiene ni siquiera canon”, agregó el productor, refiriéndose a la naturaleza variable del guion y las frecuentes alteraciones en la línea narrativa.
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